El robo de un vehículo con un niño en su interior en Iquique, Región de Tarapacá, retrata parte de la violencia con la que actúan las bandas dedicadas a estos delitos. Se trata de un fenómeno delictual con un leve incremento respecto del año pasado, sin embargo, la mayor preocupación de la fiscalía es la mutación en la forma en que se configuran.
Esto, porque las encerronas han comenzado a tener una expansión por el territorio: las carreteras ya son son las únicas atractivas para los delincuentes, sino que también han comenzado a operar en ciudades y caminos interiores. También ha quedado atrás la predilección de los antisociales por los autos de lujo, pues ahora cualquier auto puede ser un blanco.
A dichos antecedentes, aportados por el fiscal adjunto de la Fiscalía Metropolitana Occidente, Sergio Soto, en conversación con Radio Universo, se suma que parte de sus protagonistas son menores de edad entre 14 y 17 años. Si bien configuran el 30% de los sujetos identificados, el escenario sigue siendo preocupante; más aún cuando sólo un 3,6% de los casos registrados entre 2020 y este año tienen un imputado conocido.
Otro de los factores preocupantes es que los protagonistas de estos hechos han ido incrementando la violencia, "puesto que por ahora "utilizan armas de fuego y no dudan en ejecutarlas en contra de los afectados, eso es lo grave", dijo el persecutor. En efecto, en Iquique a los antisociales tampoco les importó escapar varias cuadras con el menor al interior del auto, pese a que posteriormente abandonaron la acción.
"No improvisar" y nunca prescindir de la silla
¿Cómo enfrentar una encerrona cuando hay niños a bordo? Expertos consultados por Emol afirman si bien se trata de una situación compleja que le puede ocurrir a cualquier persona, hay algunas directrices que tomar en cuenta.
"Lo primero, es conversar con la familia y con los hijos. Que ellos sepan lo que hacer si en algún momento ocurre una encerrona (...) lamentablemente tenemos que darles cuenta que existen personas que se dedican a cometer estos actos malos", planteó el fiscal Soto.
"Es importante no improvisar. Si bien es una lástima que como familias tengamos que planificar o tener un plan de qué hacer en ese minuto, es un tipo de conversación que hay que tener, como si tuviéramos un incendio en nuestro hogar o si entraran a robar en esta casa".
Andrea Malchuk, técnico en Seguridad del Niño Pasajero
La misma opinión tiene
Andrea Malchuk, técnico en Seguridad del Niño Pasajero, y creadora de "En Su Silla", emprendimiento que busca asesorar a padres y madres en materia de seguridad. "Es importante no improvisar. Si bien es una lástima que como familias tengamos que planificar o tener un plan de qué hacer en ese minuto, es un tipo de conversación que hay que tener, como si tuviéramos un incendio en nuestro hogar o si entraran a robar en esta casa".
En ese sentido, cuenta que también se puede practicar en casa cómo sacar a los niños de un vehículo, especialmente aquellos que son transportados en sillas. Esto, porque advierte que bajo ningún caso hay que dejar de utilizar estas sillas que garantizan protección para los más pequeños.
"Es posible sacar a un niño de su silla en menos de 10 segundos, pero siempre que lo practiquen antes y esté dentro de un plan de emergencia propio. En tanto, en el caso de niños un poco más grandes, es importante enseñarles a que se desabrochen solos el cinturón, siempre y cuando enseñemos a los hijos a que sólo lo hagan en momentos necesarios", explicó.
Por otro lado, recomienda que los padres nunca bajen del vehículo sin los niños. "Lo ideal es que los padres pasen por dentro del auto, suelten el cinturón de los niños y bajarse junto a ellos", plantea.
Ahora bien, una vez abajo, los niños nunca deben pasar por delante del auto, "de esta manera evitamos que los sujetos los atropellen cuando los sujetos huyen del lugar", planteó el fiscal Soto. Misma opinión tiene Malchuk, quien afirma que efectivamente, al tratarse de niños pequeños, es más difícil que sean vistos.
"El plan que yo he implementado es conversar con mis hijos y decirles que en estos casos, una vez que estén fuera del auto, deben estar afirmados a mi pierna, pegados a mi", relata.
"Sentido colectivo" frente a estos hechos
Por su parte, Alberto Escobar, gerente de Movilidad y experto en seguridad vial de Automovil de Chile, recomienda no tener vidrios polarizados, puesto que "los delincuentes van a ver que hay niños y eso puede ser un inhibidor de la conducta. Hay que recordar que estos sujetos andan como depredadores y seleccionan a sus víctimas, por lo tanto, tener los vidrios despejados podría disminuir el intento".
Asimismo, en el caso de estar detenido en un semáforo, recomienda mantener una distancia tal que sea posible mirar las ruedas traseras del auto que está adelante. "Esto permite no quedar encajonado, para alcanzar a reaccionar", agrega Escobar.
Con todo, la recomendación es siempre no arriesgar la vida de ninguno de los ocupantes y entregar el vehículo. Además, "evitar circular a ciertas horas de noche, y en el caso de los portonazos, estar alerta a comportamientos extraños al llegar a las casas y conversarlo con los conserjes y con la comunidad, es decir, hay que empezar a tener un sentido más colectivo frente a estos hechos", zanjó.