Luego de una serie de dichos cruzados con la Fiscalía, y tras las presiones de distintos gremios, la oposición e incluso autoridades de la zona, el Gobierno anunció el pasado miércoles que ampliaría una de las querellas contra el líder de la
Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul.
Esto, luego que el pasado jueves 22 de julio, el dirigente mapuche se atribuyera una serie de atentados perpetrados por su organismo en la macrozona sur durante una entrevista con Werkén Noticias, instancia donde además planteó que "la prioridad se centra en canalizar la violencia hacia el sabotaje, uno muy bien dirigido hacia insumos, hacia maquinarias".
Los dichos volvieron a causar revuelo y pusieron nuevamente al Gobierno en una posición, al menos incómoda, tal como ocurrió en mayo, cuando Llaitul habló de "organizar la resistencia armada", en medio del debate del estado de excepción 'acotado' en la macrozona sur.
En esa oportunidad, el fiscal nacional, Jorge Abbott, había advertido que "el Ministerio Público requiere una querella o una denuncia por parte del supremo Gobierno, el Ministerio Público no puede abrir de oficio una investigación sobre el particular". Desde el Ejecutivo, el Presidente Gabriel Boric, salió a señalar que "nuestro Gobierno no persigue ideas o declaraciones".
Como un deja vu, el escenario se repetía dos meses más tarde. El pasado 26 de julio, y ante los nuevos dichos de Llaitul, Abbott dijo desde el Palacio de La Moneda, que "la verdad es que se requiere, para poder investigar al amparo de la ley de Seguridad del Estado, una denuncia o querella por parte del Gobierno".
En conversación con CNN, fue la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, quien salió a responder por las afirmaciones del fiscal nacional: "Hemos fijado una posición y en esto no hay cambios al respecto. Hay investigaciones en curso y hay querellas presentadas, y por lo tanto, esperamos que respecto a estos delitos o posibles delitos sea la Fiscalía la que determine las acciones y responsabilidades".
Y agregó: "el Ministerio Público ya se encuentra con una investigación producto que el Gobierno de Chile ya es querellante respecto a las acciones de la CAM".
Siches y Fiscalía: Del llamado a investigar y "no quiso actuar"
Más directa fue la ministra del Interior, Izkia Siches, 24 horas más tarde de que Abbott expresara la posición en que encontraba Fiscalía frente al nuevo episodio abierto por Llaitul. Así, durante una actividad relacionada a entregar resultados por un operativo policial antidrogas, la ministra fue consultada al respecto, donde los llamó a investigar.
"Como Gobierno esperamos que el Ministerio Público, con las distintas querellas que ya están en curos, del 2019 y 2020, todas por Ley de Seguridad del Estado por dichos de similares características, pueda cursar una investigación y dar cuentas", sostuvo.
Sin embargo, fue esa tarde que el Gobierno retrocedió en su decisión de no tomar acciones contra el dirigente mapuche y anunció que se ampliarían las querellas en su contra, puesto que, según explicó Siches, los dichos eran "constitutivos de delito".
"Hemos querido evaluar el ampliar las querella en torno a estos hechos que nos parecen graves, como también solicitar una serie de diligencias investigativas al Ministerio Público, para demostrarle al país con claridad que el Gobierno está comprometido a resolver los conflictos en la zona, como también que no va a limitarse a usar ningún instrumento de nuestro ordenamiento jurídico", dijo Siches.
Así, la querella ampliada fue presentada en julio de 2018 durante el gobierno del ex Presidente Sebastián Piñera, que inicialmente iba dirigida contra la CAM por asociación ilícita terrorista, y que en 2021, se amplió contra Llaitul y Juan Pichún.
En la ampliación ingresada por el Gobierno del Presidente Boric, según consigna El Mercurio, se lee: "El señor Llaitul ha realizado, a lo menos, tres declaraciones públicas (...) objeto de la presente ampliación de querella, que podrían configurar delitos contemplados en la ley 12.927 (Ley de Seguridad del Estado), así como participación en diversos delitos comunes, a modo de autoría".
Pero la querella no fue el punto final, al menos no en la tensión que todo el caso Llaitul provocó en la semana de mensajes y dichos cruzados entre el Gobierno y la Fiscalía. Ayer domingo, la ministra Siches dijo en Estado Nacional de TVN que el Ministerio Público "no quiso actuar" para investigar al líder de la CAM. "Desde un inicio vimos que existían una serie de querellas por este tipo de acciones que ha sido frecuente en el tiempo, que estaban vigentes, y a nuestro juicio, el Ministerio Público podía actuar", afirmó.
Siches sostuvo que la Fiscalía Nacional estaba dubitativa al momento de tomar acciones contra Llaitul: "Existían querellas abiertas para hechos pasados y futuros que el Ministerio Público podía tomar", recalcó. "Y en este caso, al considerar que el Ministerio Público no quería actuar en esa línea, definimos ampliar la querella", dijo la ministra quien calificó dicha medida como "buena opción".
"Nosotros señalamos que la Fiscalía tenía las herramientas, aunque teníamos interpretaciones distintas. Pero más que pelear con Fiscalía y Ejecutivo, necesitábamos mostrar claridad y es lo que hizo el Gobierno", aseveró la titular de Interior.
Hasta ahora, el fiscal nacional no ha respondido a los dichos de Siches, mientras tanto, desde el mundo legislativo ya se presentaron dos proyectos -desde la DC y RN- para que la Fiscalía tenga facultades para querellarse por Ley de Seguridad Interior del Estado.