Una gran batahola se ha armado en España tras conocerse que la famosa actriz y presentadora Ana Obregón acaba de ser madre por gestación subrogada.
Debido a que en ese país este método reproductivo es ilegal, Obregón realizó dicho procedimiento en el estado de Florida, Estados Unidos, donde sí está permitido.
La noticia fue dada a conocer en la portada de la revista "Hola", que muestra una imagen de Obregón abandonando el Memorial Regional Hospital de Miami, en silla de ruedas (por protocolo del recinto médico) y con un bebé en brazos.
La celebridad, de 68 años, recurrió a este método para ser madre luego de que en 2020 sufriera la pérdida de su hijo de 27 años a causa de un cáncer fulminante, lo que la sumió en una profunda depresión. Para ella, tampoco era opción adoptar, ya que en España esto no está permitido cuando las personas son mayores de 45 años.
Este caso ha abierto un álgido debate en el país ibérico, en el que se ha involucrado desde el Gobierno hasta los partidos de oposición.
Las primeras en salir a criticar la maternidad subrogada de Obregón fueron las ministras de Igualdad, Irene Montero, quien sostuvo que esta práctica es una forma de "violencia contra las mujeres". Mientras que la titular de Hacienda, María Jesús Montero, la calificó como una "explotación del cuerpo de la mujer".
También en Chile, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, se pronunció sobre este caso a través de Twitter, tildando la gestación subrogada como una forma de "violencia" y fijando su "clara" postura frente al tema: "No 'prestamos el cuerpo'", sostuvo.
"¿Y no era mi cuerpo mi decisión?"
Estas críticas al "vientre de alquiler" formuladas desde sectores más feministas reavivaron el debate en torno a si la mujer tiene o no derecho a decidir sobre su propio cuerpo, argumento utilizado por ese mismo sector para defender el aborto.
"¿Ustedes eran las que decían el cuerpo es mío y hago lo que quiero con él? Que doble estándar", "¿Y no era mi cuerpo mi decisión?", "¿Qué pasa si una mujer si quiere arrendar su útero? Debe ser decisión de cada una ¿o no?", fueron algunos de los cuestionamientos que recibió la ministra Orellana en la red social.
¿Hay inconsistencia? La directora de Género Universidad de Magallanes, Sintia Orellana –quien es abogada y experta en derecho de género, derechos humanos y niñez– comenta a Emol que, en efecto, existe una postura "que dice que las mujeres que arriendan su vientre están actuando bajo la libertad de hacer lo que ellas quieran con su cuerpo".
Sin embargo, explica que "desde el feminismo, hay posturas súper críticas con respecto a la maternidad subrogada y cuál es la libertad que ésta incluye". Esta visión considera que la gestación subrogada "siempre que implique pagarle a una mujer, lo que se está haciendo es vulnerarla, abusar de mujeres pobres, de mujeres necesitadas; a través del dinero lo que estamos haciendo finalmente es mercantilizar los cuerpos con útero, mercantilizar los cuerpos femeninos", sostiene.
Por eso, la experta subraya que "siempre hay que distinguir en la maternidad subrogada cuando hay dinero de por medio a cuando es por parentesco o amistad", ya que el cuestionamiento de fondo "es la mercantilización y utilización de los cuerpos de mujeres empobrecidas y carentes de educación".
"Es distinta la maternidad subrogada de una madre que decide tener al hijo de su hija que tuvieron que extirparle el útero, donde no hay una remuneración económica ni una situación de poder ni de abuso con respecto a la gestante; eso es una cosa, y se tiene que analizar desde un punto súper distinto" a cuando hay un pago de por medio, donde "generalmente se trata de parejas con mucho dinero que mercantilizan con los cuerpos de mujeres muy pobres".
"Siempre hay que distinguir en la maternidad subrogada cuando hay dinero de por medio a cuando es por parentesco o amistad (...) Siempre que implique pagarle a una mujer, lo que se está haciendo es vulnerarla, abusar de mujeres pobres y necesitadas; a través del dinero lo que se hace finalmente es mercantilizar los cuerpos con útero"
Cintia Orellana, directora de Género Universidad de Magallanes
Dice que esto último se presta para que haya situaciones como "las granjas de mujeres en la India y en los países orientales, en donde a las mujeres las tienen pariendo por sumas miserables, donde ellas lo que hacen es arrendar su vientre para poder alimentar a sus hijos ya nacidos, y se utiliza su cuerpo para luego quitar esa criatura".
En efecto, las críticas que más se han repetido en el caso Obregón tienen que ver con que esto haya sido una transacción.
"Dar a luz no es comprar un bebé y fingir el posparto. Ninguna mujer puede ser explotada para que alguien compre un ser humano. La polémica de Ana Obregón nos recuerda la injusticia de la gestación subrogada", sostuvo, por ejemplo, la concejala de Madrid Rita Maestre.
Y desde Vox hasta la Izquierda Unida condenaron que se estuviera "comercializando el cuerpo de la mujer" y que "se puedan vender y comprar los embarazos".
De hecho, la ministra Antonia Orellana también advierte, en su argumento, "sobre los peligros de la gestación subrogada para fines comerciales". Mientras que Irene Montero alerta que la gestación subrogada tiene "un claro sesgo de discriminación por pobreza".
Incluso el único partido en España que apoya la gestación subrogada, que es Ciudadanos, lo valida siempre que se realice como algo altruista. Y el Partido Popular (PP) se ha abierto a que esto se debata, pero siempre que no haya ningún tipo de compensación económica.
La "violencia al apego" entre la gestante y el recién nacido
Otro aspecto cuestionable de este método es el grave impacto que tendría tanto para la gestante como para el bebé ser separados tras el nacimiento.
"Imagínate las consecuencias psicológicas y físicas que tiene para una mujer parir, para que luego sea separada de ese bebé. Y no estoy yendo a lo emocional –porque ellas hacen un contrato asumiendo que esa guagua no es de ellas–, sino que a lo físico: qué pasa con unas pechugas llenas de leche cuando tú no puedes dar leche, qué pasa con las hormonas", señala Orellana.
En la misma línea, Carolina Barriga, directora de la Escuela de Psicología de la Universidad Finis Terrae, comenta a Emol que "desde el punto de vista de la madre, el cerebro y el cuerpo de la mujer se transforman para prepararlo para la maternidad; es el despertar de una inteligencia maternal poco comprendida, que genera cambios en la mujer que son irreversibles".
Mientras que "desde el punto de vista del bebé, el embarazo y el parto dejan una huella muy importante en su vida psíquica y condiciona en muchos aspectos su desarrollo emocional".
Por esto alerta "de las consecuencias que tiene en el niño y en la madre la violencia que se ejerce de manera directa al apego prenatal en una maternidad subrogada". Y cita a la psiquiatra infantil Ibone Olza, quien señala que "el bebé gestado por subrogación, al igual que todos los de nuestra especie, espera encontrarse al nacer con la mujer que lo ha gestado y que para él es su única madre. Ser separado de ella nada más nacer y probablemente no volverla a ver suponen un trauma y una pérdida enormes: equivalentes a que su madre muera en el parto".
¿Hay más críticas si lo hace una mujer mayor que un hombre joven?
Si bien los anteriores son los debates de fondo en este tema, no deja de llamar la atención todo el revuelo que se ha generado ahora con el caso de Ana Obregón, cuando anteriormente distintas celebridades, como Miguel Bosé (en 2011), Cristiano Ronaldo (en 2017) y Ricky Martin (entre 2008 y 2020), también se han convertido en padres mediante gestación subrogada y no han sido tan abiertamente criticados. Incluso algunos han recibido felicitaciones.
La directora de Género de la Universidad de Magallanes, Sintia Orellana, comenta que "sin perjuicio de que la maternidad subrogada ya es súper criticable, obviamente cuando ésta es realizada por mujeres las críticas son mucho más fuertes que cuando son hombres".
A su juicio, esto se debe a que "en el sistema patriarcal las mujeres ocupamos una categoría de segunda clase y los hombres, aunque sean parte de las diversidades sexogenéricas, igual son hombres. Entonces, obviamente es mayormente criticable si lo hace una mujer".
"Sin perjuicio de que la maternidad subrogada ya es súper criticable, cuando es realizada por mujeres las críticas son mucho más fuertes que cuando son hombres (...) Ahora, si además tiene 68 años, interseccionan las discriminaciones, y la sociedad castiga mucho más a una mujer que es mayor, porque cruza el tema del edadismo, la discriminación por edad"
Sintia Orellana, directora de Género Universidad de Magallanes
"Ahora, si lo hace una mujer además de 68 años, interseccionan las discriminaciones, y en este caso la sociedad castiga mucho más a una mujer que es mayor, porque ahí también cruza el tema del edadismo, de la discriminación por edad", señala la experta.
Sobre las fuertes críticas que ha recibido Ana Obregón, la directora ejecutiva de Fundación Iguales, María José Cumplido, comenta a Emol que "las redes sociales dan para mucho y hoy vemos reacciones de odio en la mayoría de las publicaciones de personajes públicos", subrayando que "como Fundación estamos en contra de todo tipo de discriminación hacia cualquier persona".
Respecto de este método reproductivo en particular, si bien no explicita una postura, menciona que "la gestación subrogada es una realidad a nivel mundial" y que que "en nuestro país hay personas y parejas que han optado por este mecanismo a falta de facilidades para lograr adoptar, (ya que) la ley y el proceso de adopción son mucho más discriminatorios y dificultosos cuando se trata de parejas del mismo sexo".
