Robert Ortiz intentó tapar su crimen con un baño químico.
El Mercurio
Robo con homicidio. Ese fue el delito por el que Felipe Cumplido, fiscal (s) de Alta Complejidad Occidente, formalizó a
Robert Ortiz (31), el sujeto detenido por el homicidio de Alejandro Ortiz perpetrado ayer en la Autopista del Sol, a la altura de Cerrillos.
El 9° Juzgado de Garantía de Santiago acogió la solicitud del Ministerio Público y decretó la medida cautelar de
prisión preventiva y fijó un plazo de 120 días de investigación. Y si bien ambos son Ortiz, no hay ninguna relación familiar.
¿Cómo cayó? "En
Lo Valledor le comenta a otro testigo lo que realizó. Ahí hace trabajos chicos y al parecer vive en situación de calle. Se revisan las cámaras y cumple con las características señaladas y una de las patrullas ve a un sujeto en un paso nivel, le hacen un control de identidad y como no tenían carnet, es llevado a la comisaría y se le hace la identificación. Ahí con su foto se le muestra a testigos y lo reconocen. Ahí se ejecutó la orden de detención", explica Cumplido.
El persecutor añadió que pese al tiempo transcurrido, aun mantenía rastros de sangre en sus manos y en sus ropas.
"Al ser detenido, le dice a los policías, 'ya, me agarraron' y les confiesa el crimen", añade el fiscal.
De acuerdo a lo relatado, Robert Ortiz forcejeó con Alejandro, quien estaba desempeñándose como nochero y cuidando una maquinaria.
Ahí Robert agarró una piedra grande y le pega en la cabeza en reiteradas ocasiones. Además, le roba la mochila, donde tenía pertenencias personales y el celular.
"Para intentar tapar su crimen bota una caseta de baño químico, para que no se vea desde la carretera".De hecho, el detenido aun tenía entre sus cosas lo robado a Alejandro. Menos el celular, el que por señal dio que estaba en San Miguel, lugar hasta donde llegaron los efectivos policiales pero no lograron encontrarlo. "Así se desprende que la víctima tuvo su celular hasta las 00:40 horas. De ahí marcó señal en San Miguel, y desapareció".
En la formalización la defensa alegó que no se podía tomar en consideración el relato de los testigos, pero no fue una de las pruebas consideradas por el magistrado para decretar la cautelar.
