Esta semana quedó al descubierto un problema que viven varias residencias y organismos colaboradores del Estado. Entidades como Pequeño Cottolengo y Ciudad del Niño han vivido complejas situaciones porque, en medio de la falta de cupos en los centros de acogida para menores de complejo perfil, han sido obligadas a recibirlos, sin contar con los recursos y personal para hacerlo. Por lo mismo, la primera de dichas instituciones terminó su convenio con Mejor Niñez. Y los casos se multiplican a lo largo del país, incluso con el cierre de establecimientos que atendían a niños y adolescentes. "La crisis de cupos en las residencias está asociada a la transformación del Sename en el servicio de protección especializada Mejor Niñez. Este es un proceso complejo que, entre otras cosas, ha implicado pasar de los Centros de Reparación Especializada de Administración Directa (Cread), que eran hogares masivos, a residencias familiares", plantea Arturo Celedón, director ejecutivo de fundación Colunga.