Si bien hay consenso entre los ministros de la
Corte Suprema sobre la necesidad de separar las labores jurisdiccionales de aquellas que no lo son, todavía no es claro entre ellos cuál sería el mejor sistema de nombramientos de jueces. Por eso, en el Pleno extraordinario que se realizará hoy, tras la incomodidad -y en el caso de algunos magistrados, molestia- que ha generado el caso "WhatsApps" en el máximo tribunal, se han fijado algunos ejes para guiar el debate. ¿Debería crearse un órgano autónomo para estas designaciones o una pluralidad de ellos?, ¿cuál debiese ser su función o funciones?, ¿sería preferible que tuviera un carácter nacional o regional? o ¿cómo debiese integrarse y qué tipo de inhabilidad debieran tener sus miembros? son solo algunas de las preguntas sobre las que los supremos deberían definir una postura.
Anoche los ministros del máximo tribunal tenían en sus manos siete documentos relacionados con propuestas de reforma al sistema de nombramientos. Ellas iban desde actas sobre gobierno judicial del mismo Pleno (2014), pasando por informes de proyectos de ley (2021) y acuerdos de jornadas de reflexión de la propia Corte Suprema (2022), hasta la más reciente, la de un grupo de 18 expertos y reconocidos profesores de diversas universidades, que "EI Mercurio" publicó en la víspera. Fue el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco, quien planteó a los magistrados avanzar en la discusión de un nuevo modelo de designación, y la Dirección de Estudios del máximo tribunal habría trabajado en la recolección de antecedentes.