La necesidad de invertir en mayor seguridad en el transporte ferroviario del país, pero sin retrasar nuevos proyectos, es la mirada coincidente de los expertos sobre lo que debería hacer la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), tras el fatal accidente del pasado jueves entre un tren que se encontraba realizando un viaje de prueba con una locomotora de carga, que dejó dos fallecidos en San Bernardo. Debido al siniestro, los sindicatos de maquinistas de EFE se encuentran en un paro que tiene detenidos los servicios interurbanos que ofrece la compañía -en Santiago, Valparaíso y Concepción-, bajo la exigencia de que se implementen medidas para prevenir nuevos accidentes. Es por ello que algunos creen que este contexto podría repercutir en el avance del proyecto "Trenes para Chile", una de las grandes promesas de campaña del Gobierno, debido a que se suma a otros incidentes ocurridos, como el descarrilamiento de un vagón durante la reinauguracion del trayecto Santiago-Temuco, en mayo. Este plan, que, según dicen las autoridades, responde al "anhelo transversal e histórico" de contar con una amplia red ferroviaria, ha tenido diversos anuncios: el más importante de ellos es el tren que conectaría Santiago con Viña del Mar y que se espera que esté operativo en 2030, además de otros como el de Melipilla-Batuco.