Presidente Boric, Elon Musk y el Presidente Lula.
Emol
Una alusión a Elon Musk hicieron los Presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Gabriel Boric en la firma del Memorándum de Cooperación en Actividades Espaciales para Fines Pacíficos en el futuro Centro Espacial Nacional (CEN), que se está construyendo en Cerrillos.
En su discurso, el Mandatario de Brasil relevó que "el sector espacial es más estratégico que nunca para el desarrollo de una nación, no hay actividad hoy que no demande infraestructura espacial", y reparó que "pese a su importancia, el sector aeroespacial es una de las áreas en que la desigualdad entre los países es más grande".
"Para que los beneficios del desarrollo espacial sean compartidos por todos, es imprescindible que se fomenten en un marco sólido de políticas públicas. Las ideas de los millonarios que prefieren colonizar marte en lugar del desarrollo en la tierra, no sustituyen la acción del Estado", sostuvo.
Lo anterior fue subrayado por Boric a su turno. "Como bien decía el Presidente Lula, hay algo que quiero destacar de su discurso: El espacio no es para los millonarios, que puedan pagarse un viaje para ver la tierra desde arriba o para algunos que desarrollen proyectos y se enriquezcan, sino que el espacio también tiene que ser un lugar en donde todos quienes habitan nuestra tierra podamos beneficiarnos de esto", aseveró.
Cabe destacar que el empresario estadounidense ha hecho público su anhelo de colonizar Marte. El New York Times ha consignado que Musk busca generar nuevas especies y explosiones termonucleares.
Últimamente, el dueño de X ha entrado en declaraciones cruzadas con el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien ha calificado al multimillonario como "nuestro nuevo archienemigo".
"Si gano yo, él dimite como dictador de Venezuela; si gana él, le invito a un viaje gratis a Marte", sostuvo Musk, en alusión a su empresa SpaceX de cohetes espaciales.
Cabe destacar que recientemente, el líder chavista anunció que Venezuela rompió relaciones con las redes sociales. Con ello, desinstaló la aplicación de WhatsApp, tildándola de "imperialismo tecnológico".
