La Policía de Investigaciones (PDI) informó la mañana de hoy lunes que detectives de la Brigada Antinarcóticos Metropolitana Sur desarticularon a una banda criminal tras detener 10 individuos acusados de ingresar droga a Chile a través de "correos humanos".
Según aseguraron desde la policía civil, la estructura criminal utilizaba inmigrantes irregulares para internar la sustancia ilícita al territorio nacional. Además, el grupo operaba en la comuna de Puente Alto y contaba con un alto poder de fuego, que incluía una subametralladora, pistolas, escopetas y diversos cargadores, así como municiones de diversos tipos.
El inspector
Esteban Lineros detalló que el proceso investigativo permitió la detención del líder de la banda, quien es un ciudadano chileno.
"La complejidad de este sujeto refiere al alto cuidado que él tenía respecto a no ser sorprendido por entes judiciales o policiales", precisó. Por ejemplo, circulaba a altas horas de la noche para evitar el trabajo de los equipos investigativos.
Desde la PDI indicaron que los inmigrantes irregulares ingresaban por pasos no habilitados desde el norte hasta llegar a Santiago centro, lugar en que se producía el acopio del material que, posteriormente, sería distribuido en la comuna de Puente Alto.
La investigación terminó con la incautación de 7 kilos de cocaína y diversas armas con las que el grupo mantenía el control territorial del sector en el que operaban.
Los 10 capturados quedaron en prisión preventiva tras ser formalizados por delitos asociados al tráfico de drogas y a la tenencia ilegal de armas de fuego.