Cuando algunos advertían el lento avance del Gobierno en la gestión sobre la nueva cárcel de máxima seguridad, cuya construcción se espera iniciar durante el primer trimestre del próximo año, el Ejecutivo presentó el denominado fast track carcelario en el Congreso Nacional.
La batería de proyectos buscan tramitar con rapidez una serie de permisos administrativos para acelerar la construcción de cárceles, pero la agenda está desafiada con el rechazo que ya han manifestado parlamentarios oficialistas a la decisión de emplazar el nuevo penal de máxima seguridad en el cuadrante Pedro Montt de la comuna de Santiago, mismos que se sumaron a la oposición que ejerció la exalcaldesa Irací Hassler sobre la edificación de la cárcel en la comuna.
"Estoy tremendamente en contra de que sea ese el lugar más propicio para construir una nueva cárcel", sostuvo el diputado Gonzalo Winter (FA) en julio pasado.
Ahora es el actual edil, Mario Desbordes, quien busca poner una cortapisa. "He insistido al Gobierno de que no estoy de acuerdo técnicamente con la construcción de una cárcel de alta seguridad en el corazón de la Región Metropolitana. Creo que este tipo de establecimientos debe estar fuera de las zonas urbanas", ha sostenido.
También aseveró que "no es correcto estar trasladando a estos internos por las calles de la Región Metropolitana, porque hay un riesgo enorme que se intente rescatarlos".
Como sea, el alcalde adelantó que se reunirá con el ministro de Justicia, Jaime Gajardo este viernes a las 8.00 con al expectativa de que el Ejecutivo "recapacite".
Gobierno
Sobre la oposición de Desbordes al emplazamiento del penal en el barrio Pedro Montt fue consultado el titular de Justicia.
En conversación con Radio Sonar, Gajardo partió por aclarar que "ya tenemos actualmente una cárcel de máxima seguridad en el sector de Pedro Mont, y aquí es bien relevante, el sector de Pedro Mont tiene actualmente más de 10.000 personas privadas de libertad. En Santiago 1 y la penitenciaria nosotros tenemos más de 4.000 personas privadas de libertad, y en Santiago 1 tenemos sobrepoblación".
En esa línea, indicó que es "algo que yo en su momento conversé con la exalcaldesa, y por cierto voy a conversar con el actual alcalde, cuando nosotros planteamos la ampliación de Santiago 1, es para que Santiago 1 no tenga sobrepoblación y eso mejora la seguridad de ese entorno".
"Esto en vez de generar más presión carcelaria, lo que va a hacer es disminuir la presión carcelaria", añadió y afirmó que "al disminuir la presión carcelaria, ese sector que ya tiene una gran cantidad de personas privadas libertas va a ser más seguro de lo que es actualmente. Entonces por eso se justifica hacerlo ahí mismo".
"Yo invito a no negar la realidad, hay que tomar decisiones. Estar en el Gobierno, o pretender ser Gobierno, es tomar decisiones responsables, aunque a rato sean impopulares".
Luis Cordero
Al respecto también se refirió el extitular de la cartera, y subsecretario del Interior, Luis Cordero. "
Ya es una decisión, se va a ampliar ahí. No hay otra posibilidad", dijo en Radio Cooperativa.
Junto a eso, relevó que "esto proviene de iniciativas que vienen hace bastante tiempo. El Ejecutivo viene señalando esto desde marzo del año pasado, las proyecciones del aumento de la sobrepoblación y las consecuencias negativas que esto tenía".
"Lo segundo, que el país necesita diversificar sus estructuras de máxima seguridad. Si el país quiere mantener esta estrategia de persecución criminal contra este tipo de organizaciones, tiene que diversificar, tiene que segregar, y para eso necesita nuevos establecimientos penitenciarios, más allá de la sobrepoblación que tenemos", agregó.
En esa línea, confirmó que "ayer acaba de haber ingresado el fast track, finalmente, de cárceles, y en algunos lugares hay que construir la cárcel de máxima seguridad, y yo por cierto, comprendo el argumento del alcalde de Desbordes. O sea, para decirlo en términos sencillos, yo no conozco ningún alcalde, que quiera una cárcel en su comunidad, y por lo tanto, el argumento de él me parece un argumento legítimo".
Por lo demás, Cordero advirtió que la construcción de los actuales penales toman "catorce años, y por eso el Ejecutivo ha presentado el fast track que ya había mostrado hace mucho tiempo, porque el Ejecutivo lo ha repetido muchas veces (...) Nadie quiere una cárcel cerca, pero en algún lugar hay que construirla".
Asimismo, destacó que "del total de iniciativas para construcción de recintos penitenciarios que se trataron de implementar del 2010 hasta el año 2022, ocho se vieron frustradas por oposiciones de alcaldes y comunidades locales, y el déficit que tenemos hoy día es consecuencia de que esos proyectos no se ejecutaron".
"Yo invito a no negar la realidad, hay que tomar decisiones. Estar en el Gobierno, o pretender ser Gobierno, es tomar decisiones responsables, aunque a rato sean impopulares", cerró.
