SANTIAGO.- Los últimos años de Motorola (hoy propiedad de Lenovo) han generado una interesante historia en el mundo de los smartphones. Una de las compañías más históricas del mercado ha dedicado importantes esfuerzos para renovarse continuamente, apostando por nuevos conceptos e innovaciones en segmentos de menor costo. Dos nuevos equipos que representan ambas ideas llegaron recientemente a Chile y pudimos probarlos por un par de semanas.
Se trata del económico E4 Plus, vendido en alrededor de $150 mil fuera de todo contrato, y el más premium Z2 Play, disponible por alrededor de $500 mil. Ambos representan evoluciones interesantes aunque no totalmente exitosas de conceptos que Lenovo y su serie "Moto" han impulsado durante los últimos años.
Partamos por el más accesible E4 Plus. Su precio significa inevitablemente que en cuanto a especificaciones, no es un equipo que esté en lo mejor del mercado. Tiene un chip Mediatek MT6737 de 1,4 GHz, 2 GB de RAM y 16 GB de almacenamiento. Aunque para algunos estos datos pueden significar que se trata de un teléfono insuficiente, lo cierto es que esta vez la idea de que "las especificaciones no son todo" prima: el funcionamiento del E4 Plus es sorprendentemente bueno.
Si se saben las limitaciones (juegos muy demandantes gráficamente, especialmente), la experiencia de usar el E4 no muestra demora alguna. Si se necesita un teléfono para revisar redes sociales, contestar correos, hacer una navegación sencilla de internet o escuchar música, no hay problema.
Se nota donde Lenovo hizo "recortes": la pantalla tiene sólo resolución HD (720p) y no llega a Full HD o QuadHD. Tampoco se usa el cada vez más popular conector USB Tipo C ni se tiene una cámara que logre muy buenos resultados. Pero donde sí hay un esfuerzo importante es en la batería, que con una capacidad de 5.000 mAh, puede resistir fácilmente dos días sin necesitar una carga. Es simplemente la mejor función del teléfono (que cuenta con sistema de carga rápida), pese a hacer que sea un equipo más grueso.
El paso hacia atrás
La otra novedad es el Moto Z2 Play, la actualización de uno de los mejores teléfonos de 2016 y que mantiene el concepto de un smartphone modular, a través de accesorios que se pueden conectar y desconectar libremente, los llamados "Moto Mods".
Parte importante de por qué el Z Play del año pasado fue tan bien recibido está en su gran autonomía de batería, impulsada por una capacidad de 3.510 mAh que permitía usarlo por hasta dos días sin necesitar cargarlo.Y es lamentablemente una de las características que pierde el modelo de este año, que baja su capacidad a 3.000 mAh.
¿Por qué se hizo este cambio? Para lograr mayor delgadez, un objetivo que la industria suele perseguir. Y aquí se logra, el equipo es de los más delgados y livianos del mercado, pero queda la duda de hasta qué punto es algo importante. ¿Qué prefiere el cliente, un menor grosor o más autonomía de uso?
El Z2 sigue siendo un muy buen teléfono. Al igual que el E4 y todos los teléfonos Moto, corre una versión "pura" de la última versión de Android, sin demora alguna y en una pantalla que logra una muy buena reproducción de colores. También es destacable que pese a apuntar a ser muy delgado, se mantiene el conector de audífonos, a diferencia del Moto Z de 2016.
El problema del Moto Z2 Play es que hay pocas razones para comprarlo. Es un buen teléfono, pero no destaca frente a equipos de la competencia que innovan en diseño, resolución de pantalla o en la calidad de sus cámaras, algo que sigue siendo un punto débil para Moto. Los Mods son interesantes (al parlante, proyector y cámara del año pasado se suman más carcasas con baterías externas y un control para videojuegos) pero requieren una inversión extra para un teléfono que ya cuesta $500 mil.
La apuesta del Z2 es interesante pero quedan dudas de si conquistará al usuario. En cambio, con el E4 Plus, Moto parece tener un equipo ganador que puede generar impacto en el segmento más económico del mercado de smartphones.
