CABO CAÑAVERAL.- Horas antes del lanzamiento del Falcon Heavy, Elon Musk, fundador de SpaceX ha estado publicando en sus redes sociales imágenes e información relativa a la prueba de vuelo. Sin embargo, no sólo sus comentarios son los que han llamado la atención, luego de que sus principales contendores se han tomado el tiempo de entregarle buenos deseos para esta jornada.
El primero fue Jeff Bezos, CEO de Amazon y Blue Origin -uno de los principales competidores de SpaceX- quien escribió en su cuenta de Twitter: "La mejor de las suertes a @SpaceX con el lanzamiento" que está programado para este martes a las 15:30 horas de Chile.
A lo que agregó: "Esperando que sea un hermoso vuelo de acuerdo al plan", firmando el mensaje con una mención a su propia compañía espacial -Blue Origin- y agregado un hashtag con el lema que ha impulsado en su compañía "Gradatim Gerociter", que significa "paso a paso, ferozmente", en latín.
Bezos recibió una
respuesta del propio Musk horas más tarde que no sólo decía "
gracias", sino también incluía un emoji de un beso con un corazón. Esta reacción causó miles de impresiones -además de 1,4 mil reuits y 19 mil "me gusta"- denominando esta escaza relación como "bromance" -una relación de amigos-.
Quien también le escribió al líder de SpaceX fue el CEO de United Launch Alliance, Tory Bruno, poseedor del Delta IV Heavy, con un mensaje mucho más pequeño, pero no menos importante: "Buena suerte", fueron las palabras de Bruno.
El peso de estos deseos radica en las consecuencias que podría tener para la industria un lanzamiento exitoso, ya que podría sentar nuevas bases sobre el costo y la forma en que se envía carga fuera de la Tierra y, eventualmente, a otros planetas como Marte.
Según los reportes, el despegue del Falcon Heavy de SpaceX tiene un costo inicial de 90 millones de dólares, mientras que el Delta IV Heavy comienza su costo de lanzamiento en 350 millones de dólares, una diferencia importante cuando se intenta hacer de esta práctica algo cada vez más usual.
La reducción de los costos es la base para Elon Musk quien en el pasado ha detallado la importancia de hacer que sus cohetes sean reutilizables, permitiendo así que el valor de las misiones sea menor. Es por esto que si SpaceX logra una prueba de vuelo exitosa, podría significar un gran golpe para Blue Origin y United Launch Alliance que tienen grandes fichas puestas en sus proyectos espaciales, pero que no han logrado reducir los costos de sus viajes.
