Vive con Claudia Vial hace 7 años. Hace poco se cambiaron a Vitacura, pues es un lugar más central para todos. Tiene una casa grande –“botamos algunos muros, porque estaba llena de recovecos y me encanta como quedó”-. Es sobria y refinada, se parece a él.
Alberto Daiber es un hombre múltiple: médico, empresario, director de cine y profesor de aikido -un arte marcial, cuyo objetivo es vivir en paz y armonía, dando vida a la tolerancia, la ayuda y la cooperación-.
Tal vez sea esta última actividad la que le permite coordinar su quehacer de manera de poder llegar a su casa después de un largo día, jugar con sus hijos, tomarse unas cuantas cervezas y darse el tiempo para conversar como si fueran las cinco de la tarde.
-¿Tienes hobbies?
“Cocinar y el aikido. Practico tres o cuatro veces a la semana, voy antes de empezar el día de trabajo”.
-¿Qué te gusta cocinar?
“Tengo un gusto amplio. Me encanta hacer guisos: las papas con mote ¡las hago exquisitas!, los porotos, las guatitas. También algunas cosas más finas, como el carpaccio de salmón con rúcula.¡Ponlo, porque si no van a pensar que soy un bruto!
"Por supuesto, los asados, porque me gusta mucho la carne”.
-¿A qué restorán vas con más agrado?
“El Parrón es bien agradable. El Eladio. El Divertimento, para la comida italiana. Morriña para una excelente comida española. Puerto Perú, también. Mis gustos son variados y me junto a almorzar y conversar allí con los amigos”.
-¿Muchos amigos?
“Pocos, igual que todos los hombres. Un arquitecto, un médico, un biólogo, son los que me han durado más años. Otros son como amigos de la familia y varios que perdí cuando me separé”.
-¿Qué música prefieres?
“El jazz, el pop –más bien el rock- y algo de música clásica”.
-¿Libros?
“Ensayo y poesía. Maturana, Borges, Neruda. Todo Sabater, porque piensa parecido a mí, pero es más versado. Me gusta la filosofía, me he dado cuenta con los años”.
-¿Eres trapero?
“Para nada. (Se ríe) ¡Por suerte siempre alguien me ha comprado la ropa!
¡Mírame los zapatones que uso! – se los saca y los muestra- Necesito andar con ellos, porque siento un alivio tremendo”.
-¿Te consideras guapo?
“No, no. Hubo una época, cuando era joven, que sí; ahora tengo un cierto encanto personal frente a la gente, en general…aunque debe haber otras personas a las que les caiga mal, también”.
-¿Deseos no cumplidos?
“Mmmm….algunas mujeres, pero ¡en fin!, dejémoslo hasta ahí no más, para no abrir nuevos frentes”.
-¿Vicio privado?
“¡Puta la pregunta difícil!... (piensa y se ríe)…éste me aproblemaría demasiado; la masturbación la dejé hace mucho tiempo… ¡ya sé!...tomarme un buen brandy –ahora sin el cigarrito porque lo dejé-, viendo un partido de fútbol o de tenis, que son las únicas cosas que todavía veo en la tele. Ah…también me encanta bailar”.
