No se dio respiro. A horas de haber terminado la grabación de la teleserie que lo hizo conocido, “Tentación”, se tomó un breve descanso e inmediatamente se abocó a sus proyectos suspendidos, entre otros, el ensayo de la obra “La retirada de Moscú” que se estrena los primeros días de mayo.
De ahí a la grabación de la próxima teleserie del Trece sólo un paso. Pareciera que César Sepúlveda no quiere perder ninguna de las oportunidades que se les están presentando.
Y eso tiene una explicación. Antes de conseguir un lugar en la tele debió desempeñar distintos oficios para mantener a su familia. Hoy, entre risas, enumera: testeador de perfumes, profesor de teatro, vendedor, garzón, taxista, payaso de cumpleaños y mimo de supermercado.
A sus 25 años, su futuro se ve más despejado. Canal 13 le renovó el contrato para el segundo semestre luego de que los ejecutivos se enteraran que Megavisión lo estaba pololeando. Lo hicieron firmar antes de salir de vacaciones. “Eso es bueno porque uno se siente importante”, comenta.
La misma sensación de satisfacción expresa cuando se le comenta su nominación al Apes como revelación actoral: “Es entretenido que reconozcan tu trabajo, fue bien sorpresivo y te indica que, para la visión de algunos, estás haciendo las cosas bien y eso te llena el ego”.
Es difícil creer que este actor, que parece todo un experimentado, haya estudiado sólo un año de teatro “por problemas económicos” en la escuela de Gustavo Meza y sobre todo que haya elegido la profesión por descarte.
Estudió publicidad dos años, se salió y después no supo qué hacer, tenía claro que no quería nada relacionado ni con oficinas ni con corbatas ni con números, así que se decidió por algo artístico. Primero pensó en dibujo, pero concluyó que era muy solitario, después optó por estudiar canto, para probar un año, y no le gustó, entonces “lo único que me quedaba era estudiar teatro, me metí y me encantó, realmente me fascinó”.
-¿Quieres terminar tu carrera?
“Por supuesto, si se da la posibilidad de juntar plata. También me encantaría viajar y hacer cosas paralelas como danza”.
¿Te apasiona el teatro?
“Sí, esto es mi vida. Me di cuenta que es lo que quiero hacer hasta que muera. Pero recién estoy partiendo, quizás en algún momento me aburra de hacer siempre lo mismo, pero por ahora, esto es lo que más me mata”.
El destino se encargó de su entrada al canal. Meses antes de que empezaran a grabar “Tentación”, Cesár fue a dejar un currículum al canal, sólo para probar suerte, pero tuvo que esperar más de la cuenta a quien se lo tenía que recibir.
Por esas cosas del azar, cuando estaba a punto de irse, la persona en cuestión apareció y le comunicó que se había improvisado un casting para el día siguiente. No lo pensó, se presentó y quedó.
“Fue en el momento preciso, en el lugar preciso y con la persona precisa”, asegura.
-¿Prefieres la tele o el teatro?
“El teatro es fascinante, aunque la TV es muy entretenida. Las dos cosas me gustan mucho, pero el teatro es más lindo, más romántico”.
-¿Qué rol te gustaría interpretar?
“Por estereotipo, siempre me van a dar cierto tipo de papel, porque te encasillan. Me gustaría que me dieran personajes que no tengan que ver con mi tipo físico”.
-¿No quieres que te encasillen como galán?
“No poh, pero igual pasa y sería entretenido que los directores probaran con otros papeles”.
-¿No te has sentido discriminado por no haber terminado tu carrera?
”No, menos ahora con lo del Apes. Uno piensa hasta qué punto es necesaria la escuela para hacer de esto una profesión, si también te lo da el oficio y el carrete que se va teniendo. Soy respetuoso con el oficio, creo que las personas que estudian una carrera son las que tienen que ejercerla, pero a mí se me dio así y me hubiera encantado terminar, pero no se pudo y mala suerte, ya está”.
-¿No has pensado que si no fuera por tu pinta no te hubieran llamado?
“Sí, lógico, sobre todo por este personaje (Nicolás) que tenía que tener características bien marcadas como ser canchero, medio encachadito y de familia ABC1, entonces caí parado.”
-¿Te consideras talentoso?
“Sí, no sé si será por instinto. Hay muchos actores que no terminan ejerciendo porque también se necesita talento y mucho oficio, porque es harta pega y responsabilidad. Si bien es un juego entrete, es tu trabajo, hay un horario que cumplir y cosas que respetar y en ese sentido soy bien profesional”.
-¿Cómo te acogieron los otros actores?
“Súper bien, generalmente son muy nobles, sobre todo los con que trabajé; la María (Izquierdo), Cristián (Campos) y el Tito (Noguera). Y me vieron esforzado, siempre llegaba con las cosas aprendidas, a la hora, vieron que quiero hacer de esto una profesión y terminar mi carrera”.
-¿Eres mateo?
“Sí, me lo han dicho varias veces y me gusta ser así”.
-¿Te hiciste amigos en la teleserie?
“No, mis amigos son del colegio mayormente y mi partner trabaja en un banco. Del medio no tengo amigos, hay mucha gente simpática, buena onda y linda, pero son sólo conocidos, hasta el momento no he logrado hacer amistad con nadie”.
-¿Estás satisfecho por tu desempeño?
“Demasiado, a pesar de que soy bien autocrítico y pienso que las cosas siempre pueden salir mejor. Pero estoy contento con lo que hice, fue una buena experiencia, aprendí mucho”.
-¿Muy perfeccionista?
“No creo en la perfección, pero sí que todo puede ser mejor. También uno debe tener la humildad de decir que las cosas están bien como están y punto”.
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