La época de la adolescencia y el embarazo son los períodos de mayor probabilidad para la aparición de estrías. Estas lesiones cutáneas se producen, por lo general, a causa del daño de la estructura de la piel debido a variaciones bruscas de peso, aumento de talla, distribución del tejido adiposo y factores hormonales; por eso, su aparición está ligada a determinadas etapas de la vida de la mujer.
Emilia Zegpi, dermatóloga y secretaria general de la Sociedad Chilena de Dermatología, explica que además existen otros motivos:
"Hay ocasiones en que las estrías tienen que ver con enfermedades endocrinológicas relacionadas con problemas de la tiroides o las glándulas suprarrenales".
Estas marcas, que pueden llegar a ser verdaderas cicatrices, no sólo son un problema femenino; los hombres también tienen, aunque en menor porcentaje. La doctora Zegpi asegura que es una de las lesiones más comunes:
"Dos de cada tres mujeres presentan o van tener estrías durante su vida".
Las zonas típicas para su aparición son pecho, abdomen, interior de muslos y glúteos. Aunque a muchos hombres les salen en los bíceps y espalda a raíz de un mayor desarrollo muscular.
| Algunas soluciones |
Peeling Green Peel: Tratamiento regenerador de la piel sobre la base de aplicación de hierbas en la superficie cutánea, que activan la regeneración desde las capas interiores. Se necesitan varias sesiones, dependiendo de la calidad de la piel y de las características de la lesión.
Dermoabrasión: Una máquina proyecta microcristales de aluminio sobre la estría, impactándola, rompiendo los capilares dérmicos y provocando la regeneración celular, lo que facilita que se vaya cerrando. Se necesitan varias sesiones; el número depende del tipo de piel, el ancho, localización y color de la lesión.
Láser de luz pulsada: Se aplica en la estría misma y en la piel adyacente, con lo que se logra estimular la producción de colágeno y elastina. La piel se hace más turgente y elástica, disminuye la diferencia de textura entre la lesión y el resto. Se necesitan varias sesiones, el número depende de la intensidad de la lesión.
Cirugía estética: En los casos de estrías muy pronunciadas se hace una plastía en la que se corta la piel dañada y se estira el resto. La intervención se realiza en la cara interna de muslos, abdomen y mamas.
Cremas y geles: Una de las principales medidas de prevención es hidratar la piel, aplicando crema en las zonas constantemente. Para eso, la industria cosmética cuenta con varias alternativas para combatirlas.
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Al contrario de lo que sucede con la celulitis,
el bronceado no las disimula, sino que las hace más evidentes, porque la piel de las estrías no se pigmenta y su color claro las delata. "Se supone que cuando es violácea rojiza se trata de una rotura reciente y es más fácil de tratar; si tiene un color más blanco lo más probable es que sea más antigua, y, por lo tanto, difícil de combatir", explica el dermatólogo Gonzalo Pantoja.
Mucho se habla de borrar o disimular estas líneas, pero no es fácil, y ésa puede ser una de las mayores frustraciones.
La genética es determinante, eso explica que haya personas que aún cuando usan cremas igual las tienen, y otras que pueden pasar varios embarazos sin presentar huellas en su piel.
Según la dermatóloga, esto no quiere decir que no haya nada que hacer; por el contrario, la prevención es importantísima:
"Hidratarse como hábito constante desde jovencitas, mantener una dieta equilibrada que ayude a sostener el peso sin variar la talla tan drásticamente y sujetar la piel con faja, sobre todo durante y después del embarazo".
El doctor Pantoja enfatiza en la necesidad de mantener la piel siempre nutrida, en especial cuando se prevé un estiramiento importante de ella, como sucede durante el embarazo. "Lubricarla le ayuda a estar más elástica, a distenderse con mayor facilidad y menor riesgo de una rotura de las fibras de colágeno". El especialista agrega otras medidas de prevención, como beber mucha agua y evitar el uso de jabones que la resequen por tener un pH distinto al natural.
"Estos cuidados disminuyen la probabilidad de que salgan muchas estrías o demasiado marcadas, pero en ningún caso son garantía de su total ausencia; eso depende de la calidad de la piel. Hay personas con mayor predisposición a generar estas lesiones en comparación con otras, que sin cuidarse gozan de pieles tersas, ya que poseen una mayor producción de colágeno y elastina", aclara.
Atenuar sí, borrar no
En cuanto a los tratamientos, no hay milagros. Las estrías se pueden atenuar en color y textura, pero hasta ahora es imposible borrarlas por completo. La doctora Zegpi advierte que la efectividad del proceso depende, en gran medida, de cuán reciente es la lesión. "Cuando recién aparecen son de color violáceo rojizo y en su evolución terminan blancas.
El ideal es tratarlas cuando están rojizas, porque es cuando mejor responden a los tratamientos; si llevan más tiempo la respuesta será parcial, y el resultado no tan bueno".
Al parecer, una vez que las estrías se instalan, quedan para siempre. El doctor Pantoja cuenta que lo que puede hacer un buen tratamiento es estimular las células vecinas a ellas para que se regeneren y retapicen esas zonas fibrosas.
Para eso se necesita
una aplicación tópica constante de componentes como ácido retinoico y ácido glicólico, que deben ser indicados por un especialista.
Como resultado, las estrías se vuelven menos evidentes. El color se empareja con el de la piel vecina, se adelgazan y se hacen más elásticas. Pasa de ser una piel fibrosa y con depresiones cutáneas visibles, a una piel mucho más flexible.
Si llevan más tiempo y los tratamientos para regenerar la piel vecina no son muy efectivos, se pueden tratar de equiparar los tonos; es decir, que la piel vecina tenga más o menos el mismo tono que la cicatriz. Esto se hace con medicamentos como la vitamina C, que ayudan a pigmentar o despigmentar piel o estrías.