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Una chica alegre y con iniciativa

21 de Noviembre de 2005 | 18:22 |
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Está en quinto año de Derecho y tiene muy claro hacia donde va a encaminar sus pasos. Contrariamente a lo que se podría pensar –que siguiera el derecho penal, defendiendo a los débiles- le gusta el derecho comercial, vinculado a la libre competencia o las fundaciones, donde cree que puede seguir desarrollando su inclinación por el servicio público.

-Pero si el derecho penal hoy es tan entretenido.
(Se ríe tímida) “Sí, me encanta estudiarlo, pero no me veo trabajando ahí”.

Constanza es la quinta de una familia compuesta por ocho hermanos; doce años la separan de su hermana mayor y sólo 6 del menor, o sea, ha aprendido a vivir inmersa en un mundo de múltiples intereses y demandas.

Un poco impulsada por la necesidad de ayudar económicamente, pero también por su deseo de ir cimentando cierta independencia, se autofinancia su carrera universitaria desde hace dos años.

Para eso, ha desarrollado todo tipo de oficios: mesera, babysiter, dependienta de librería, vendedora ocasional de todo tipo de productos como vestuario y accesorios, y últimamente, procuradora en oficinas de abogados.

Su personalidad alegre, pero un poco tímida, hace prever que no le debe ser difícil vincularse con todos y generar lazos de confianza.

-¿Diste ese paso un poco buscando independencia?
“Sí, aunque al principio es difícil, es buenísimo. Sentir que estás apoyando en tu casa, pero que aparte, tienes la libertad de hacer lo que quieras con tu plata, no tonteras (se apura a precisar), porque te la ganaste, es bueno”.

-¿Cómo es vivir en una familia de ocho hermanos, algo inusual hoy? ¿Qué se aprende?
“Es lo máximo, demasiado entretenido, mi familia es increíble, no sé si todo el mundo tendrá la misma suerte.
“En las familias grandes se aprenden muchas cosas; a compartir, a tolerar, uno vive la generosidad, yo nunca tuve un chocolate para mí sola, siempre era para todos; los cuentos en la mesa son geniales, o sea, uno espera que llegue el domingo para estar todos al almuerzo”.

Sigue muy motivada: “uno aprende mucho, nunca he tenido pieza sola y he tenido que aprender a compartir y ceder. Que a lo mejor no siempre puedes tener la luz apagada porque el otro quiere leer o lo mismo con tu música. En definitiva, a no reclamar por todo. Sí (se auto confirma), se aprende mucho”.

-¿Una buena escuela de vida?
(Entre risas) “Reciedumbre, fortaleza”.

-Pensando que estás medio día en al frente de “Estoy vivo” y el resto sacando la universidad, ¿te queda tiempo libre?
“Sí, tengo mis pasatiempos. Me encanta cocinar, estar con mi familia, mis amigas y mi pololo… ahora, no es tanto el tiempo libre tampoco (se ríe)”.

-Juventud con pilas recargadas.
“Sí… pero yo funciono mucho mejor bajo presión. Mientras más cosas tengo que hacer, mejor me organizo y mejor funciono. Hay gente que empieza a estudiar los exámenes un mes antes y yo no puedo, lo hago el día antes”.

-¿Y los resultados?
“No, bien”.

Constanza pololea hace más de tres años y en su proyecto de vida está casarse y formar una familia, ojalá grande. Se atropella un poco cuando se le pregunta si se va a casar pronto y declara que se ve también trabajando como abogada, ligada a un proyecto pro vida.

“De verdad, cuando ves que una mujer que aborta, sufre y otra, que decidió tener su guagua, está feliz… hay que gritarlo a los cuatro vientos”.

-¿Te será difícil ser madre y profesional a la vez?
“Ser abogado es difícil, nuestros profesores siempre nos dicen que pelean con sus señoras porque llegan tarde. Además, a las mujeres igual se nos exige harto, ser buena mamá, ser buena mujer y ser buena en la pega.
“Lo importante, en todo caso, es no tratar de convertirse en un sucedáneo del hombre; creo que hay tratar de llevar las cualidades propias de la mujer al trabajo y no convertirte en un hombre; llevar la entrega, la donación, la generosidad”.

-¿Te será más fácil que a otras generaciones?
“Creo que sí; puede ser que los hombres estén en otra parada, pero creo que hemos peleado tanto el tema que hemos ido ganando un poco de terreno y se ha entendido que la mujer tiene un rol importante en el mundo del trabajo”.

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