El exilio no lo marcó muy profundamente, pues dice que era chico y que la persecución era más bien contra sus padres, ambos prominentes médicos. No obstante, sí tuvo repercusiones sobre la familia que debió separarse tempranamente.
Con 21 años, Luis regresó al país a cargo de sus hermanos y sus padres se fueron a España. "Siquiera tuvimos la suerte que no nos detuvieron ni nada de eso", dice.
-Pero igual fue una situación familiar complicada ¿o no?
"¡Imagínate!, pero en el caso de nosotros funcionó bastante bien finalmente; no fue un drama tremendo como para otra gente. Lo que sí fue complicado es que nos fuimos a Argentina donde nos tocó otro golpe y la represión era tremenda, pero también la acogida que teníamos era increíble. Siempre nos trataron súper bien, conocimos gente muy buena, que son amigos hasta el día de hoy".
Para ganarse la vida ha hecho muchas cosas, entre ellas ha sido intérprete varias veces, porque habla varios idiomas: inglés, francés y algo de italiano y portugués. También ha sido modelo. Sin embargo, fue educado en una escuela (tanto familiar como escolar) de qué uno tiene que saber de lo que habla, así que es muy riguroso con los aprendizajes.
Luis Weinstein se ha casado dos veces; primero, joven, con una francesa, con la que tiene dos hijos grandes y, luego, con una mujer joven, nacida en Estados Unidos, con la que tiene tres más, todos chicos.
El mayor tiene 25 y "es un tipo muy brillante"; estudió psicología y vive en Uruguay con su novia. El segundo está en tercero de sociología y "es aplicado y también muy brillante". Los chicos tienen 5, 3 y 10 meses, respectivamente. La más chica es Clarita, la única niña de papá. Los mayores estudiaron en la Alianza Francesa y el de cinco en "The Grange". "Tiene que ver con los orígenes de sus madres", dice riéndose.
-¿Alguna frustración?
"Sí, poh, no estar expuesto en el MoMA (Museo de Arte Moderno) antes de los 40, jajajaja".
-¿Deseos no cumplidos?
"Noo, me siento bien afortunado, porque realmente hago una cosa que me gusta; que me ha costado harto, pero ha sido mi decisión y, finalmente, he logrado exponer en lugares relevantes, interesantes. A mí, realmente, la fotografía me apasiona".
-¿Deportes?
"Practico natación desde chico y, ahora, con mayor razón".
-¿Te gusta la música?
"Mucho, pero aparte del timbre, soy incapaz de tocar nada. Además, tú viste la cantidad de discos que hay en mi casa. Para darte una idea, en la misma corrida está Led Zeppelin, tango, clásicos, brasileros, hip hop, música chilena, jazz, los Rolling Stone".
-¡Todo!
"No (se ríe), casi todo. A julio Iglesias no me lo banco ni a los Huasos Quincheros tampoco. Hay hartas cosas que no me gustan".
-¿Tienes tiempo para leer?
"Hago lo posible, pero me cuesta leer novelas y eso, porque, en general, estoy un poco pillado en las horas; uno está muy cansado de repente, pero en el verano me doy tiempo. Lo que sí me gusta son los ensayos, en particular los que tienen que ver con arte o fotografía".
-¿Cocinas?
"Sí, harto, me encanta. Mi especialidad es la paella".
-¿Vicio privado?
"Ir a nadar; tener una hora y media solo para relajarme en la piscina".