Juan Pablo Ogalde se confiesa introvertido y algo de eso trasmite. De mirada esquiva y look consumido, con cierto dejo misterioso, pareciera que se tratara totalmente de otra persona -más allá del actor- cuando está en pantalla o sobre un escenario, donde despliega toda la intensidad y potencial que lo caracterizan.
Por estos días está concentrado en su personaje en “Mala Conducta”, la nueva teleserie de Chilevisión (segunda del área dramática de ese canal, después de “Vivir con 10”) que debuta en marzo, a las 20 horas. Ahí interpreta a Pelayito Bobadilla, el mayor de cuatro hermanos que asume la responsabilidad del colegio y la familia en que se centra la historia.
“Es muy correcto, ordenado, ocupa un rol bastante adulto y protege a su madre (Magdalena Max-Neef) de los problemas con su padre (Willy Semler), que es bien infantil, entonces asume como papá, marido e hijo. Es bien complejo, un personaje muy interesante para trabajar. Después conoce a una chica que le mueve el piso (Javiera Hernández)”, cuenta.
-Esta es tu segunda teleserie en CHV. Estuviste en “Vivir con 10”, una apuesta arriesgada para el canal. ¿Cómo lo ves ahora?
“Sin duda es una apuesta arriesgada pero de alguna manera te ayuda a crecer o conocer otro tipo de género o distintos lenguajes de comunicación. Tuvimos la suerte que nos fue bien, siendo que era un público nuevo. Pero el guión era bueno, los personajes pegaron. Yo creo que a ésta también le irá bien”.
-¿Ya no se siente el nerviosismo de la primera vez?
“Estamos tranquilos, es un trabajo en el que se necesita pasarlo bien también y quizás los nervios se los llevan los ejecutivos y los de producción, pero los técnicos y actores asumimos un papel más tranquilo, para que el producto salga bueno”.
El actor recién terminó de grabar una película sobre la poetisa chilena que instaló el liberalismo femenino, Teresa Wills Montt. La cinta, de Tatiana Gaviola y que también protagonizan Francisca Lewín y Diego Casanueva, narra la vida de esta mujer casada con Gustavo Balmaceda y que lo engañaba con varios amantes, entre ellos el poeta Vicente Huidobro.
“Yo interpreto a su esposo, que sufría de celos potentes y le hizo la vida imposible. Fue un trabajo muy lindo y profundo, el guión es súper bueno”, comenta.
El año pasado, Ogalde se dio el gustito de estrenar la película “Fuera de la cuerda”, una coproducción suiza-italiana del director Fulvio Bernasconi. El actor coprotagoniza la cinta sobre peleas con Valentina Cervi y Claudio Santa María (“El último beso” y “Casino Royale”). “Me vieron en “Mala leche”, en el Festival de San Sebastián, necesitaban a un sudamericano y me llamaron”, explica sobre su fichaje.
-¿Qué tal la experiencia de grabar afuera?
“Una experiencia increíble, muy entretenida y muy diferente a cómo se solventa una película acá. Los suizos tienen mucho dinero para hacer cine, muchas comodidades para trabajar, es todo más moderno. Cada uno tenía su casa rodante, entonces era muy rico”.
-Tuviste que aprender a hablar italiano y todo eso. ¿Fue muy difícil?
“Sabía un poco de italiano, porque me encanta y me metí a clases. Además, alcancé a estar un mes allá preparándome, entonces me resultaba más cotidiano. Ahora, no es que hable un italiano fluido, pero entiendo mucho. Igual fue difícil porque ellos dan vuelta los verbos, pero fue parte de una apuesta y quizás era arriesgado pero no perdía nada con probar. Había que hacerlo y tirarse a los leones”.
-¿Fue emocionante verte?
“Vi el estreno y lo pasé pésimo, porque es típico que uno se encuentra pésimo y viene la autocrítica. Hay gente que le encantó mi trabajo y otros que criticaron la película. Pero la experiencia es impagable y creo que todo actor debería salir a trabajar afuera. Yo sé que es difícil por el tema de la visa. Pero haberla visto, aparte de los nervios, fue súper emocionante, porque era el único chileno y verme ahí... No sé si la película en sí me volvió loco pero la situación fue bien entretenida”.
-¿Qué proyectos tienes?
“La obra “Norte”, con Víctor Carrasco, que empezaríamos a trabajar en marzo y que trata sobre tres hombres de distintas edades que están encerrados en una casa y que buscan ese norte que cada ser humano tiene. También la película de Pablo Díaz, “Súper”, que gira en torno a un supermercado. Le faltaba financiamiento pero ya está bien encaminada. Está bien chora la idea”.
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