Fabrizio Antonio Copano Vera, alias “la pantera Copano”, nació el 6 de marzo de 1989. Vivió su infancia en Puente Alto, según él rodeado de delincuentes pero con TV por cable e Internet como salvación.
Es el segundo de tres hermanos y asegura ser bien diferente a Nicolás. “Soy más relajado, él es muy explosivo y muchísimo más mediático”.
- Se nota en pantalla que él es mucho más extrovertido también y tú algo más pudoroso.
“Sí, tengo un rollo con eso todo el tiempo, por eso me siento tan incómodo en la tele. Trato de pensar que nadie me está viendo pero en realidad el programa es súper visto”.
- ¿Y cómo lo haces con el stand up?
“Ha sido mi mejor tratamiento. Un tiempo lo dejé y terminé en un psicólogo que me recetó unas pastillas para alguien casi al borde del suicidio y yo tampoco estaba tan deprimido, me afectaban algunas cosas, como la guerra de Irak. Y cuando volví a hacer stand up se me pasó completamente y volví a ser feliz. Me siento cómodo, tranquilo, me comunico bien con la gente, hacerlo semanalmente me da seguridad, como para hablar con las mujeres, por ejemplo, que es todo un tema para mí”.
- ¿Eres tímido con las mujeres?
(Baja la mirada) Sí, soy tímido, me gustan mucho las mujeres pero me ponen tenso y siento como un desafío hacerlas reír todo el tiempo”.
- ¿Cómo te gustan?
“No me gusta un tipo especial de mujeres. No es que me gusten especialmente las mayores, como a mi hermano, pero siempre me he relacionado con gente mayor que yo. A veces intento ser joven pero como que me cuesta, me siento falso”.
-Eres como un viejo chico.
“Sí, soy muy diferente al resto de mi generación y siempre lo he sido porque me juntaba con otra gente, hacía otras cosas. Venimos de Puente Alto y mi mejor amigo de niño terminó siendo un delincuente. Allá las juntas te llevan a eso. Gracias a Dios que Internet y el TV cable nos salvaron para conocer otras realidades, en ese sentido”.
-¿Qué dicen tus papás del camino que han tomado tú y tu hermano?
“Igual les da nervio, que nos pueda ir mal, el tema del fracaso. Pero tengo súper asumido el tema del fracaso, para mí es algo que va a suceder y que ojalá suceda pronto y que venga bien. Pero para ellos, que no hayamos caído en ninguna otra opción de mierda, como les pasó a tantos de mis vecinos, que se transformaron en maleantes, entonces están contentos por eso”.
-Pero el mundo de la TV también está lleno de maleantes.
“Sí, en la TV está lleno de gente rasca, el medio es muy penca. Los famosos se creen la raja y ser una estrella en Chile ¡no es nada! Menos mal que con Nicolás tenemos esa visión de la realidad más tranquila, me siento un tipo muy normal. Hay gente que realmente no ha hecho nada y se cree el cuento. ¡¿Qué ha hecho Lucho Jara?! Quienes de verdad pueden creerse el cuento son tipos como Jorge González o Álvaro Henríquez”.
-Es inevitable que siempre te comparen con tu hermano. ¿Se ha dado una suerte de competencia entre ustedes, aunque sea inconsciente?
“Sí, pero eso lo hace más la gente que nosotros mismos. A veces él agarra eso y es una lata pero de a poco vamos tomando caminos distintos y así nos hacemos más incomparables”.
-¿Por qué el sobrenombre ‘pantera’?
“Porque todos tenían sobrenombres bakanes e intenté que Fabrizio Copano pareciera un nombre artístico como Facundo Cabrera pero no resultó y no sé por qué inventé lo de pantera. Me parece divertido y tan estúpido”.
-¿Vicio privado?
“Dormir poco, comer poco, no tomo casi, no me drogo. Creo mi vicio es la falta de vicio. Y claro, también la comedia; no tomar nada en serio”.
-¿Y eso no te ha traído problemas sentimentales, por ejemplo?
“Sí, he destruido relaciones sentimentales por eso. Piensan que no las tomo en serio. Tengo problemas con los límites, que están muy difusos en mi estructura y mucha gente termina odiándome, ¡pero no puedo evitarlo!”.