El cáncer de mama es la primera causa de muerte oncológica entre las mujeres a nivel mundial. Y aunque en Chile ocupa el segundo puesto (detrás del cáncer de vesícula), en los últimos años se ha visto un leve aumento de la mortalidad por esta causa en el país.
Los datos más recientes del Ministerio de Salud sobre muerte por cáncer mamario entre las chilenas -aún no son publicados oficialmente- muestran un aumento de 13,5 a 14,2 muertes por cien mil mujeres en el período 2004-2005.
Los nuevos datos indican que en 2005 fallecieron por cáncer de mama 1.169 chilenas, 76 más que el año anterior.
"Aunque es un alza a la que hay que prestar atención, no se trata de un gran aumento, no es una situación de descontrol", señala la doctora Soledad Torres, cirujana de mama de la Clínica Las Condes y del Hospital San Juan de Dios.
Razones del alza
Un análisis realizado por investigadores de la Universidad de Santiago muestra que la mortalidad por este cáncer ha mostrado "un alza constante y significativa" en las últimas tres décadas, "a pesar de los esfuerzos realizados a nivel de prevención y detección precoz", como precisan sus autores. La investigación se basó en datos de los Anuarios de Estadísticas Vitales del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) entre 1973 y 2004.
Así se pudo determinar que mientras a principios de los '70 la mortalidad por este cáncer era de 0,473 por 100 mil habitantes, en los últimos cinco años de revisión (2000-2004), la tasa promedio fue de 0,667 por 100 mil habitantes.
Las cifras parecen contradecir los avances registrados en los últimos años en el combate al cáncer de mama. Las terapias hoy en día son más efectivas, desde el 2000 en Chile hay cobertura de drogas gratuitas para un mayor número de pacientes y las nuevas técnicas de imagenología permiten detectar lesiones precancerosas más precozmente.
"Probablemente sin estos avances la mortalidad sería mucho más elevada", dice Torres.
| Moderno tratamiento |
Un ingeniero chileno participa en el desarrollo de una tecnología que introduce imágenes tridimensionales que localizan el punto preciso en el cual se origina un tumor mamario, lo que permitirá a los médicos realizar extirpaciones "más precisas, seguras, simples y, por lo tanto, más exitosas, con menos exposición a radiación y menor riesgo de recurrencia".
Así lo explica Thomas Wendler, ingeniero civil electrónico de la U. Santa María y actualmente alumno de doctorado en la U. Técnica de München, quien, gracias a este invento, fue ganador de la IBTEC 2007, competencia mundial de planes de negocio.
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Entre las razones del alza, los expertos mencionan un mejor registro de los diagnósticos de cáncer de mama en los certificados de defunción. Sin embargo, la principal causa apunta a la falta de un programa masivo de exámenes de detección precoz de este tumor. "Eso sería lo ideal, pero implica una inversión y recursos que no siempre están disponibles", precisa el doctor Octavio Peralta, jefe del Programa de Mama del Servicio de Salud Metropolitano Central.
Por esa razón, dice la doctora Torres, la recomendación de una mamografía anual a partir de los 40 años la siguen sólo de forma voluntaria y a su propio costo las mujeres que están más concientizadas respecto de la importancia de la detección precoz.
"Si una lesión precancerosa se detecta in situ, la sobrevida a 10 años es de casi el 100% y al detectar en etapa I, la tasa de curación a 10 años es de 90 a 95%", dice la experta. Sin embargo, si el cáncer se detecta en etapa III, la probabilidad baja a 40% y en fase IV o avanzada "la sobrevida a los 10 años es nula", agrega Peralta.
Por fortuna, dicen los expertos, hoy más mujeres se someten a una mamografía, por lo que existe una mayor pesquisa y registro de casos malignos, y son pocas las pacientes diagnosticadas en etapas avanzadas.
Envejecimiento
Otro factor que está incidiendo en el aumento de la mortalidad por cáncer mamario, tanto en Chile como en el mundo, es el envejecimiento de la población. "El peak de muertes ocurre pasados los 60 años. Entonces, en la medida en que hay más población envejecida, seguiremos encontrando más casos", dice el doctor Peralta.
Así como la mamografía es fundamental para la prevención de este cáncer, los médicos enfatizan la importancia de adoptar hábitos de vida saludables. "Los tres pilares fundamentales son: evitar la obesidad pasada la menopausia, evitar el alcohol y realizar actividad física constante", dice el doctor Peralta.
Para evitar recidivas, el doctor Tony Howell, presidente del Comité de Cáncer de Mama del Reino Unido, quien recientemente visitó Chile, destaca que "el uso de inhibidores de la aromatasa como anastrozole y otros se ha convertido en el gold standard para detener el avance del cáncer de mama".
Otra alternativa es la mastectomía bilateral profiláctica en mujeres con antecedentes genéticos de cáncer mamario. "Es una alternativa extrema, pero que se está usando en otros países", comenta el doctor Peralta.
