Esta película no debieran verla parejas en crisis. Lo advertimos.
Jean Pierre es un própsero hombre de negocios que tiene en casa a una guapa y ociosa mujer, Odile, que lo único que hace es gastar y gastar dinero en compras innecesarias. Pero el problema no reside ahí, sino en que hace tiempo llevan una vida lejana y sin ningún tipo de contacto, incluido el sexual. De hecho, duermen en piezas separadas.
Todo pareciera del gusto de ambos, hasta que el chofer de Jean Pierre, que experimenta una situación similar en su casa, le mete ideas en la cabeza a su jefe. En otras palabras, si Odile quiere plata para sus gustos, tiene que pagar por ello... de ahí el nombre de la película "El precio a pagar".
Claramente, este film nos llevará a cuestionarnos varias cosas: ¿cuántas veces nos acomodamos con el statu quo sin tener la fuerza y decisión por cortar con algo?; ¿en qué ocasiones las relaciones se transforman un un simple acuerdo comercial?
Jean Pierre y Odile parecen no haber descubierto el camino para seguir juntos pese a tener una hija adolescente.
En definitiva, una película para pensar. Mientras, pueden deleitarse con más detalles en el
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