La tendencia es que las bases y los labiales traigan incorporados activos fotoprotectores. Pero si bien éstos son una buena alternativa para el día a día, sobre todo en invierno, no son suficientes para proteger la piel de los efectos dañinos de los UVB y UVA. Aquí, verdades y mentiras sobre el maquillaje con factor solar.
1.- El maquillaje protege nuestro rostro de los rayos ultravioleta.
FALSO: Si la base, polvos y labial que utilizamos no contienen ninguno de los activos químicos capaces de protegernos de los rayos solares (como el óxido de zinc o el dióxido de titanio, por ejemplo), estos productos no ofrecerán ninguna protección. En otras palabras: por más que "cubramos" nuestra piel con maquillaje, ésta se expondrá a los efectos dañinos de la exposición solar tal como si estuviéramos a "cara lavada".
2.- El maquillaje con algún nivel de protección SPF basta como filtro solar.
FALSO: "Estos productos entregan una protección moderada, no 'todo terreno"', explica la dermatóloga de la Clínica Alemana Francisca Sánchez. Eso se debe a que, por lo general, su nivel de protección es muy bajo y no cubren el rostro de manera generalizada y homogénea como lo requiere el uso de cualquier filtro solar convencional. Los especialistas consideran que un nivel de protección SPF es aceptable desde 15 para arriba. Sólo aceptable, porque ningún filtro solar protege en un 100%.
3.- El maquillaje con SPF debe retocarse cada dos horas para asegurar su protección.
VERDADERO: Un estudio publicado en el Journal of the American Academy of Dermatology demuestra que después de dos horas aproximadamente la base de maquillaje se mueve y acumula en las líneas de expresión y poros. Eso significa que una base con SPF deja de cubrir y pierde su capacidad de proteger la piel contra los rayos ultravioleta a partir de la tercera hora, por lo cual debe ser retocada.
4.- Un labial con SPF 10 es suficiente protección para los labios.
FALSO: Los labios tienen una piel más delgada y prácticamente carecen de melanina (pigmento que nos protege del sol), lo que los hace muy susceptibles a los efectos dañinos del sol. Por esta razón, lo recomendable es aplicar (y reaplicar cada dos horas) un producto especial para los labios con filtro SPF 15 o más, idealmente opaco. Si le gusta el look brillante y mojado que da el gloss, aplique primero un labial opaco con SPF y luego cubra con un brillo.
