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Review: Probamos el Hue de Philips y definitivamente nos "iluminó" este fin de año

Si te pidieran elegir un recuerdo preciado; de la niñez o de algún otro momento importante: ¿Cómo lo recuerdas? ¿Te gustaría poder revivir el ambiente de esas memorias a través de la luz? Ahora es posible gracias a la tecnología.

25 de Noviembre de 2015 | 14:17 | Por Felipe Contreras, Emol
Las películas futuristas de los 80's y 90's nos mintieron: estamos casi en 2016 y todavía no tenemos autos voladores, robots que se hagan pasar por humanos y ayuden con las tareas domésticas (o tengan historias románticas con nosotros); o cirugía plástica al instante con una pastilla. Por lo tanto, tenemos que seguir utilizando el transporte público terrestre, haciendo las compras y cargando los paquetes y soportando esas arrugas que cada mañana nos recuerdan el inexorable paso del tiempo (snif!).

Sin embargo, sería muy mal agradecido de nuestra parte negar los avances que han alcanzado la ciencia y la tecnología y que se han traducido en objetos que nos hacen más fácil la vida. Ahora todo es un poco más inteligente, desde la cafetera que nos despierta hasta los autos que frenan y se estacionan solos.

Es en ese contexto de "la modernidad" en que aceptamos la invitación que nos hizo Philips para probar uno de sus productos estrella: el Hue. Al principio, el nombre no nos dijo nada y nos imaginamos que podía ser cualquier cosa; desde una depiladora (y no vamos a decir que no nos alegramos porque a más de uno/a le hacía falta) hasta un producto para la cocina (que tampoco hubiera sido mala idea, porque talento culinario no nos sobra).

Pero no, el Hue es un sistema de iluminación "inteligente" que, en pocas palabras, permite administrar a gusto la intensidad, el color y los tiempos de la luz de nuestro hogar. Con el Hue ya no es necesario cambiar ampolletas
$149.000
cuesta el kit inicial con 3 ampolletas y 1 bridge
(se acabó la eterna disputa entre luz fría o cálida), o comprar las a veces tan poco estéticas pantallas de lámparas para dar onda a un ambiente. Y, como si fuera poco, se puede utilizar a distancia: programar, prender y apagar luces, definir ambientes, etc. Todo con el celular.

Cuando llegó la caja me sorprendió su simpleza. No vienen muchos cables ni manuales: las instrucciones vienen impresas en el envase, por lo que no se necesita hacer un postgrado para instalarlo (¡gracias!). 3 ampolletas LED y una especie de router (que se llama "bridge", con su respectivo cargador) son los elementos que contiene el kit Hue. La instalación es igual de simple: los focos se ponen en cualquier lámpara porque son estándar, no necesitan ni pilas ni adaptadores. Y el cerebro, que es esta especie de enrutador, se conecta a la corriente y con un cable de red, al modem de internet de la casa. Tiempo total utilizado: 5 minutos (lo que se agradece).

Para administrar esta innovación es necesario contar con: Internet en la casa (router de banda ancha), un smartphone y bajar una app que está disponible para IOS o Android.

El Hue tiene varias gracias. Algunas ya las mencioné pero es bueno recapitular:


- Se puede programar de forma independiente las luces de cada una de las ampolletas que forman parte del kit. Y esto incluye la intensidad de luz que entregue cada una, el color, la duración de la iluminación, etc.

- No es necesario estar en la casa para utilizarlo: Una vez instalado todo y conectado a la app del celular, puedes prender y apagar luces desde cualquier parte del mundo mientras tengas acceso a internet. Por lo mismo, es ideal si dejas la casa sola por vacaciones y necesitas dar la sensación de que tu espacio sigue ocupado y espantar a los amigos de lo ajeno.

- Para los niños también es una buena herramienta, porque puedes programar sus luces para que duerman mejor o, cuando tienen problemas para conciliar el sueño, puedes dejar una de las ampolletas con una luz muy baja con un color que le agrade para que se sientan seguros.

- Para los "carretes" es lo máximo: puedes darle una onda muy chora a tu casa, eligiendo combinaciones de colores o dándole una identidad distinta a cada ambiente.

- Como los tiempos no están para el derroche, Hue es una buena alternativa de ahorros de largo plazo: Al ser tecnología LED, el consumo de energía es muy bajo. Además, al tener la posibilidad de programar el funcionamiento de las luces, evitas eso de "se me quedaron las luces prendidas".

- La app de Hue tiene una opción activable que se llama "geofencing" y que utiliza el posicionamiento de los smartphones. Cuando te acercas a tu casa, prende las luces, y cuando te vas, las apaga. Una buena opción si eres (como yo) de esos que siempre salen atrasados y cuando llegan cuando ya oscureció chocan con todo.

- La opción que, en mi opinión, más me marcó de este nuevo dispositivo es la posibilidad que entrega de elegir los colores de la iluminación. Por supuesto, la app viene con una paleta con miles de colores. Asimismo, trae de forma predeterminada varios "escenarios" que combinan las ampolletas del kit para crear ambientes playeros, de bosques, de nieve, o perfectos para la concentración o el sueño. Sin embargo, lo que creo es lo más destacable es que te ofrece la opción de tomar una fotografía vieja o algún objeto que te guste (una flor, una prenda de ropa, una pintura) y pedir que Hue copie el color e ilumine tus ambientes con esas tonalidades. Así, si tienes una foto, puedes revivir la luz de algún atardecer que recuerdes de tu infancia o la serenidad de un paisaje que descanse en la memoria.

- Las empolletas tienen una duración estimada de 15 años. Así que relax, no se deberían quemar a la semana siguiente de realizada la inversión.

¿Dónde y cuánto?


El kit de Hue se vende sólo en tiendas MAC Online a $149.990 (contiene 3 ampolletas + el bridge). Sin embargo, un sólo "router" puede administrar hasta 50 ampolletas a un mismo tiempo, por lo que se pueden comprar por separado ($44.990 cada una).
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