La diversidad gastronómica está creciendo. Atrás quedaron los días de las simples terrazas de los restoranes. Ahora se puede pedir más: en altura, kitsch, al interior de antiguas casonas o incluso en ex conventos convertidos en restaurantes. Acá las nueve mejores para escapar del calor:
Bravo 951, el bar del momento
Bravo 951 es, hasta el momento, una de las mejores aperturas del 2016. Nada tiene que envidiarle a los bares neoyorkinos con su sencilla pero moderna fachada de ladrillos y fierros que la hacen estar a la vanguardia. Por fuera el lugar no dice mucho, pero lo primero que recibe a los visitantes es una larga barra del bar que sirve para aquellos que están esperando que se desocupe una mesa. Pero lo mejor está afuera: un amplio patio con grandes mesas, arboles que entre sus ramas sujetan ampolletas que iluminan el lugar y como también las ilustraciones que decoran sus paredes. Pero no hay que olvidar su carta. Es corta pero precisa con una tendencia a los sabores norteamericanos.
Es imperdible su hamburguesa rellena con queso cheddar, cebolla al vino tinto, setas grilladas, salsa de queso azul y brotes verdes, acompañado con unas adictivas papas fritas caseras ($6.000). Para quienes van en grupo es recomendable la entraña a la parrilla con charchas al vino tinto que vienen acompañados de coleslaw, papas mayo, cebolla caramelizada con un toque de mostaza ($10.000). Intente reservar antes de ir o llegue temprano para encontrar mesa.
Bravo 951, Providencia.
Silabario, intimo y chileno
Abrieron en julio del 2015. Silabario es un restaurante que rescata los sabores de la cocina tradicional chilena. Todo esto lo hacen desde una antigua casona ubicada en el Barrio Italia que se demoraron un año y medio en refaccionar donde se luce su patio trasero que quisieron mantenerlo en formato casero donde primara el verdor de las plantas y con pocas mesas para que se mantuviera cierta intimidad.
Como buen restaurante chileno lo que prima es el sabor, entre sus platos estrella puede encontrar un osobuco con su médula acompañado de cremoso de mote y pilco ($8.000) y un cancato de merluza austral al horno rellena de queso mantecoso, albahaca y tomate acompañado de pastelera de choclo ($8.000). En Silabario todos los detalles han sido cuidadosamente pensados y los platos son de greda y cerámica de gres, en la panera viene pan de quínoa, sopaipillas con zapallo, pebre de cochayuyo y pebre clásico. Sinceramente, imperdible.
Abierto desde martes a viernes desde las 19:00 hasta las 00:00. Sábado 13:00 hasta las 00:00. Domingo desde 13:00 hasta 17:00. Lincoyán 920, Providencia. 225025429.
El Camino, con sabor a Texas
También en barrio Italia El Camino, emplazado en una antigua casona, tiene una amplia terraza con grandes mesas que están hechas para ir en grupos o quienes van solos o en pareja se tienen que sentar con otras personas. Es decir, la premisa es compartir.
De los platos de fondo sin duda se recomienda la carne brisket, es un corte clásico tejano para ahumar proveniente del pecho del vacuno que cocinan por 12 horas ($6.800). Eso se lo puede acompañar con un plato muy condimentado y sabroso como el chile preparado con un guiso de porotos con pasta de tomate, chocolate, café y ají ($3.200) o un coleslaw estilo El Camino con repollo a la parrilla y aliño de palta ($2.800). Lo mejor es pedir varias opciones para compartir. Reservar antes de ir.
Lunes y domingo cerrado. Av. Italia 1034, Providencia. 229860765.
Room 09, el bar speakeasy
Los speakeasy eran establecimientos que vendían de manera ilegal bebidas alcohólicas durante la época de la Prohibición en Estados Unidos (1920–1932 apróx). Inspirado en esa idea es que fue creado Room 09, ubicado en el hotel Tinto de Bellavista. Este lugar se caracteriza por ser uno de los bares especializados en la alta coctelería en Santiago, pero hay solo dos formar de entrar a él: tener una exclusiva tarjeta de membresía o decir quiero conocer la habitación número 09 al terminar la comida en 040, el restaurante del hotel, comandado por el chef Sergio Barroso.
El bar está en una terraza semitechada, tiene una estética industrial de los años 20 y la gente toma al son de la música de los años 20. Acá se puede encontrar todos los cocteles clásicos de la época de Al Capone más las creaciones de autor. ¿Recomendación? Para vivir la experiencia completa, pedir el Manhattan de 1891, es la primera receta de este coctel que se prepara de una forma completamente distinta a los otros y con otros productos.
Antonia López de Bello 040, Providencia.
Rooftop Bar, junto a una piscina
Tiene una de las mejores terrazas de Lastarria. Ubicado en el noveno piso del hotel The Singular, lo primero que llama la atención de este bar es su lujosa barra donde el cliente queda a la misma altura del bartender listo pedir cocteles donde la mayoría son de autor, es decir, no se encuentran en ningún otro bar. Pero también se puede ir solo a disfrutar de su privilegiada terraza con vista al Cerro Santa Lucía y al San Cristóbal junto a su piscina. De su carta, destaca el Tártaro de filete o las tapas como la de chorizo de ciervo, ostión, puré de palta y jalapeño o confit de pato con puré pallar, a $1.200 c/u.
Abierto de lunes a sábado desde las 18:00 hasta 1:00 hrs. Merced 294, Santiago. 223068820. Para reservas anfitriona@thesingular.com.
SkyBar COFA, vista a la ciudad
Este bar está en las alturas, específicamente en el piso 16 del Hotel Renaissance Santiago. Es un lujo poder disfrutar de los cocteles de SkyBar Cofa mientras se mira el atardecer en la ciudad. Tienen preparaciones de autor como el Blueberry apple con pisco, manzana, arándanos, rosé y tónica, ideal para quienes buscan un sabor más dulce. Y tienen otros como el Sangría Fresca con chardonnay, pepino, sandía, menta, naranja y melón para escapar de los días calurosos.
Mariano Bambaci, chef del hotel, fue el encargado de crear tapas especialmente para el bar, entre ellas destacan el Curry verde de camarones con chips crocantes, el tiradito de salmón fresco, ají verde y maracuyá y el nigiri de lomo liso, mayonesa de wasabi. Selección de 3 tapas $8.000. Selección de 5 tapas $14.000Abierto de martes a sábado desde las 19:30 hasta 1:00 am. Av. Presidente Kennedy 4700, Vitacura. 226788805.
S33W70, terraza hipster
Recién inaugurado en noviembre del año pasado, esta moderna y colorida terraza del hotel The Hip ha dado que hablar no solo gracias a su privilegiada vista que permite observar el agitado Patio Bellavista, sino también gracias a su innovadora carta de coctelería con tragos como Frida preparado con licor de fresa, Aperol, prosecco italiano y agua mineral o el mojadito con Gin Mare, lima, naranja, albahaca y tónica, ideal para los días de verano. Para comer tienen sánguches como el costillar de cerdo en pan amasado ($5.900) o platos como pescado del día ($7.900) o pollo con salsa agridulce ($6.990).
Pío Nono 73, Providencia. Patio Bellavista. 969082378.
Sarita Colonia, un peruano con onda
Faltan palabras para definir a Sarita Colonia. Transita entre lo kitsch, teatral y dramático. Su puesta en escena lo dice todo: una decoración totalmente recargada con imágenes de santos y objetos antiguos que en este espacio, donde abunda el color rojo, negro y dorado, adquieren otro significado. Pero es una estética que termina por atrapar y encantar a los visitantes, gracias a que hay pocos lugares así en Santiago.
Los dueños definen la cocina de Sarita Colonia como peruana travesti, ya que la base son los sabores peruanos revestidos de cocinas de otros lugares como su Mim-Pao que es masa brioche rellena con lomo saltado, envuelto en papel de arroz y pac choi. No deja a nadie indiferente como tampoco lo hace su terraza que da hacia recoleta con una pared que simula tener nichos y su barra especial que saca coloridos cocteles como el corazón de Sarita preparado con Finlandia, tangerine, zanahoria y betarraga.Loreto 40, Bellavista. Lunes a sábado de 19 a 24 horas. 228813937
La Diana, una experiencia diferente
Emplazado en lo que antiguamente fue un ex convento y conectado directamente con los juegos Diana, de ahí el nombre de este restaurante. La Diana replica el mismo estilo de decoración que La Jardín, ambas creación de los mismos dueños, es decir, una gran recolección de cosas, mucho reciclaje y todo distribuido calculadamente al azar, pero en esta oportunidad en un edificio histórico frente a la Iglesia de los Sacramentinos. Entre sus puntos más fuertes está su terraza que es un gran pasillo con grandes columnas que da hacia la iglesia con mesas y sillones para terminar de dar un ambiente relajado.
Su carta es versátil, corta, pero para todos los gustos. Destaca su plateada al horno con pastelera de choclo y una pequeña ensalada a la chilena ($6.800) o también sus pizzas.Arturo Prat 435, Santiago. 226328823.
