Cocina: Tres recetas para alucinar con los sabores de Lima

Me instalé en Lima por algunas semanas. Necesitaba una inyección de ideas e inspiraciones, las que llegaron paso a paso mientras me perdía recorriendo sus locas calles y avenidas, siempre a toda velocidad en sus increíbles combies que viajan raudamente tomando pasajeros y luchando contra su atorado tráfico.

Opté por quedarme en el hermoso distrito de Miraflores, donde gran parte de los turistas solo están de paso para tomar otras conexiones. Lo elegí ya que quería recorrer, sentir y llenarme del gran ambiente gastronómico, que te invita a degustar las maravillas que ofrecen los distintos restaurantes, sangucherías y "huariques". Éstos realmente no paran de sorprender por la calidad de sus productos, el respeto hacia ellos y el profesionalismo de sus cocineros, quienes siempre innovan en sus preparaciones, siempre con la cabeza bien puesta en el respeto y amor por su cocina criolla, la que impacta por su sazón, picardía, abundancia y, sobre todo, cariño.

Cebicherías emblemáticas como La Mar, donde el rey es el pescado, que a pocas horas de ser extraído es llevado casi como diamante para que cebicheros y cocineros desplieguen su arte y podamos degustar increíbles preparaciones. Grandes restaurantes como Maido, Astrid & Gastón, la Picantería, Osaka, la Lucha, Tanta, los Bachiches, Panchita y Papachos. Tuve la suerte de visitarlos y de disfrutar de un excelente servicio y alucinante comida, que asombra por su diversidad y sabor.

No puedo dejar de mencionar los anticuchos de corazón, un imperdible de las esquinas limeñas, cebiches y tiraditos, sudados y parihuelas que hacen revivir a más de un muerto… Imperdible también es recorrer la calle Capón, sumergirse y dejarse llevar por los sabores de la comida chifa (fusión china peruana).

Podría escribir cientos de páginas, pero la gastronomía peruana da para mucho más. La mezcla de la cocina criolla y de la propia de los inmigrantes hizo estallar una de las más grandes culinarias a nivel mundial.

Es así como cada estadía en Lima siempre se transforma en un viaje de conocimiento, aprendizaje, placer, respeto y, por supuesto, de ganar unos cuantos kilos de más... Si se tentaron, aquí le comparto tres recetas con las que pueden alucinar.

Saludos,