SANTIAGO.- Al igual que en Chile, la Navidad es celebrada en muchas partes del mundo con millonarios sorteos que llegan a los ganadores como un regalo caído del cielo. En España, por ejemplo, es tradición que un coro de niños cante los números de la Lotería navideña, tal como si fuera un coro de ángeles celestiales que llegan con la milagrosa buena nueva.
Ayer jueves fue el día en que los menores cantaron y los ganadores salieron a la calle a celebrar con sus vecinos que eran millonarios. Y uno de ellos fue una mujer de Granada, que eufórica, no dando más de la felicidad, salió con los suyos a festejar que había ganado nada menos que el Premio Gordo del sorteo, supuestamente, porque tenía el boleto con el número sorteado: el 66.513.
Inmediatamente llegó al lugar una periodista del programa “Andalucía directo” de Canal Sur, para entrevistar a la aparente ganadora. “Ya no lo enseño más”, dijo la feliz mujer, temerosa de que el boleto de la suerte terminara perdiéndose. Pero apenas tuvieron que insistir para que generosa, y entre el clamor de sus vecinos, mostrara el billete de lotería, guardado celosamente en su busto.
Fue entonces que, desde el estudio del programa televisivo, advirtieron que existía una lamentable confusión: el número de la mujer no era el 66.513, que era el ganador. Su boleto decía, simplemente, 66.813. “¿No es el Gordo? ¿Cómo? (…) ¿No es el 8?”, preguntó ella a alguien tras las cámaras. Mientras, un joven al fondo de la multitud, llevaba sus manos a su rostro, lleno de asombro.
“Bueno, tengo el segundo (premio). No importa”, se consolaba la mujer, con un supuesto boleto ganador que no pudo mostrar en cámara. “Se lo ha llevado mi suegra, me lo ha quitado”, había explicado antes.
Por la noche, la misma periodista de “Andalucía directo” constató que a la familia de la mujer, efectivamente le había tocado el segundo premio de la Lotería.
En el video se ve al clan familiar festejando tras la reportera, aunque, curiosamente, la mujer que protagonizó el lamentable error, no se vio en pantalla, pero ya se había hecho lo suficientemente conocida a nivel país tras viralizarse su equivocada celebración.
