El 31 de enero de 1977 la ciudad de París estaba dividida. Las autoridades de esa época inauguraban el Centro Georges Pompidou, un edificio que para esos años era arriesgado, provocador, innovador y muy llamativo. Muchos aseguran que desde ese día el rostro de la capital francesa, y en especial el del barrio Le Marais, había cambiado. No obstante, 40 años después este inmueble es mundialmente reconocido como el centro del arte moderno de la ciudad luz.
Su fachada era lo más controversial, sus paredes de vidrio estaban rodeadas, en la parte externa, por una gran cantidad de andamios y grandes escaleras metálicas. Quienes lo veían por primera vez llegaban a pensar que la construcción no se había detenido.
Para llegar a este diseño el gobierno de la época, encabezado por el presidente que le dio su nombre, llamó a un concurso donde se presentaron más de 600 propuesta de profesionales provenientes de 49 países. Finalmente ganó el diseño creado por los arquitectos Richard Rogers, Renzo Piano y Gianfranco Franchini.
El centro esta situado en el distrito IV de París, uno de los más tradicionales y antiguos de la ciudad, donde se le conoce como “la fábrica de gas” y en la actualidad es el edificio más visitado de toda Europa ya que contiene exposiciones permanentes donde destacan las obras de artistas tales como Picasso y Matisse. Además ofrece espacio para todas las expresiones del modernismo, ya sea en pintura, escultura, cine, literatura y música, entre otras tendencias.
"Hoy alberga en su interior la colección de arte contemporáneo más grande de todo el viejo continente. También se pueden visitar sus 2 bibliotecas y el centro de investigación musical que se encuentran en las dependencias del edificio"
COCHA
En la agencia de viajes COCHA comentan que este edificio se le conoce como “el mall de la cultura” en París y destino obligado para muchos turistas que llegan a la capital francesa precisamente para recorrer sus instalaciones.
“Hoy alberga en su interior la colección de arte contemporáneo más grande de todo el viejo continente. También se pueden visitar sus 2 bibliotecas y el centro de investigación musical que se encuentran en las dependencias del edificio; sin embargo en las afueras de éste, en la Plaza Georges Pompidou, también se pueden encontrar diferentes expresiones artísticas callejeras”, dicen en COCHA.
Un gran punto de encuentro
Precisamente esta plaza se ha transformado el mejor escaparate para las expresiones artísticas no solo de los parisinos, sino de todos los artistas que llegan a tierras galas. Músicos callejeros, mimos y artistas en todas sus expresiones se presentan en este espacio.
Hasta acá también llegan exponentes de deportes extremos, como skaters, o de disciplinas circenses. Incluso, se habilitan mesas para cenar en las noches de verano. Por esta razón, muchos atribuyen precisamente a este espacio el rotundo éxito que ha obtenido este centro de la cultura.
En 1983 esta zona de la ciudad luz también se vio engalanada con la construcción de la fuente Stravinsky, dedicada al compositor ruso, y que ofrece a sus visitantes una bella estructura con 16 esculturas. La obra incluye piezas en movimiento y aspersores de agua que buscan rendir homenaje a la producción artística del músico ruso.
Como dato anecdótico, las dos exposiciones temporales que más visitantes ha tenido en estos 40 años de existencia tienen al mismo protagonista. En 1979 la monografía dedicada a Salvador Dalí recibió a 840 mil personas y en 2013 el mismo artista catalán congregó a 790 mil visitantes.
