EMOLTV

Mujer vive hace ocho años en el aeropuerto más lujoso del mundo: conoce aquí su insólita historia

Se trata de una mujer en sus '50 que, aunque parezca extraño, no tiene problemas económicos, pero igual optó por trasladarse a la terminal de Changi y pasar sus días allí.

09 de Febrero de 2017 | 11:36 | Emol
SANTIAGO.- Una mujer de Singapur decidió hace ocho años dejar el hogar donde vivía, para instalarse de manera permanente nada más y nada menos que en el aeropuerto de Changi, terminal que es considerada como la más lujosa del mundo.

Y no es que se trate de una mujer de escasos recursos, sino que por el contrario vivía en una de las zonas más acomodadas de la ciudad. Sin embargo, según informó el diario argentino La Nación, la crisis que el país atravesó en 2008 le imposibilitó continuar con su holgado ritmo de vida, lo que solucionó arrendando su departamento -un triplex- por mil dólares y se fue a vivir a Changi. Una inteligente idea para reducir gastos, pero no comodidad.

En los ocho años que lleva habitando el aeropuerto, la mujer se ha ganado a los empleados a fuerza de simpatía y buenos modos: es conversadora y su riqueza cultural le permite intercambiar jugosos diálogos con los pasajeros de todo el mundo que llegan a la estación.


Pero, ¿por qué Changi es objeto de deseo de los denominados "habituales", nombre que reciben los residentes en las terminales de transporte?

La razón radica en que el aeropuerto cuenta con los servicios básicos para pasar una "vida confortable": wifi gratis, duchas, una variedad impresionante de restaurantes, un supermercado, librerías, farmacias y tiendas de ropa. Pero, además, quienes transitan por él pueden acceder a jardines diseñados por reconocidos paisajistas, donde encuentran colecciones de orquídeas, cactus y girasoles dispuestos de manera armoniosa y vistosa.

Y como si eso fuera poco, hay zonas de descanso con sillones reclinables y de masajes; una piscina en la terraza, además del spa y el gimnasio con todos los servicios incluidos; salas de cine, un taller de dibujo y un reservorio. Y para terminar, un completo salón de peluquería y belleza.

Buenos vecinos


La curiosa cincuentona no es la única residente permanente de este aeropuerto de Singapur. Un hombre de unos 60 años cuenta con alojamiento propio: un departamento compartido con un amigo. Pero la mala relación entre ellos lo llevó a irse de allí y dormir en la terminal. Durante el día visita su hogar, aunque de manera esporádica. Insólitamente, él es pasajero en su casa y residente en el aeropuerto.

Este hombre es uno de los diez "habituales" que comparten la estadía en el espacio público. El aeropuerto más lujoso del mundo se convirtió para ellos en el dulce hogar ideal con todos los servicios y la imposibilidad del aburrimiento.

¿Sus vecinos? Los millones de pasajeros que cada año atraviesan el check in.