Ilott abandonó su hogar con Jackson a los 17 años para vivir con su novio, con quien se casaría.
AP
LONDRES.- La Corte Suprema británica falló el miércoles contra una mujer que demandó el testamento de su madre, quien legó toda su herencia a organizaciones defensoras de los animales.
Melita Jackson murió a los 70 años, en 2004; y desde entonces su única hija, Heather Ilott (madre de cinco niños) ha recurrido a la justicia para cambiar la voluntad de Jackson, quien la excluyó de su testamento y dejó 500 mil libras esterlinas ($413.569.364) a organizaciones pro animal, a quienes también dejó la orden de oponerse a cualquier intento de su hija de demandar el testamento.
En 2007, un tribunal de condado le concedió 50 mil libras esterlinas ($41.356.936) a Ilott, señalando que Jackson había actuado de manera “irracional, caprichosa y severa”. Y en 2011, la Corte de Apelaciones consideró que esa cifra era insuficiente, y la aumentó a £143 mil ($118.280.838) para que pudiera comprar una casa, añadiendo otros £20 mil ($16.542.774) para costos de vida.
Sin embargo, la decisión tomada ayer por la justicia británica anula este último fallo, dejando solo válido el de 2007, que estimó la entrega de £50 mil.
Esta última sentencia fue una victoria para Blue Cross, la Sociedad Real para la Protección de Aves y la Sociedad Real para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales, las organizaciones beneficiadas con la herencia de Jackson.
Uno de sus voceros señaló que dicho fallo confirmó "el derecho de decidir quién será el heredero tras nuestra muerte".
Jackson e Ilott estaban distanciadas desde 1978, cuando la hija abandonó el hogar a los 17 años para vivir con su novio, Nicholas Ilott, con quien se casaría.
"Lógicamente, Heather está muy desilusionada con el desenlace del juicio en la Corte Suprema", dijo el abogado Martin Oliver. "Es una madre trabajadora que inició una demanda para pedir una suma razonable de la herencia de su madre".