El Kruger es el mejor y más famoso de los 400 parques y reservas naturales que tiene Sudáfrica, y por años ha sido el destino preferido por quienes desean vivir la experiencia de un verdadero safari.
Su territorio es impresionante y cubre cerca de 19 mil kilómetros cuadrados que son administrados en gran medida por el Estado de Sudáfrica, aún cuando también tiene reservas privadas.
Las áreas públicas pueden ser recorridas manejando su propio vehículo y se deben respetar ciertas normas como el no abandonar los caminos delimitados. Si desea pasar la noche en el parque también existen algunos lugares donde está permitido acampar o hay pequeños lodges, muy básicos, donde solo se ofrecen camas.
Esta es la opción más barata para recorrer el Kruger, pero también es donde menos animales se pueden divisar dado que la movilidad está restringida solo a los senderos establecidos.
Distinto es con las reservas privadas del parque que por un precio mayor ofrecen una hotelería de mucho mejor nivel, alimentación, y la increíble aventura de salir de safari en un todo terreno acompañado por guías experimentados. Estos los llevarán a zonas donde se pueden apreciar de mejor manera las manadas de elefantes, leones y resto de especies que vagan libremente por esta zona.
Estos tours están autorizados para salirse de los caminos públicos, siempre acompañado de expertos en la zona, para internarse en el corazón del territorio sudafricano para disfrutar de uno de los espectáculos naturales más impresionantes del mundo.
Para quienes quieran vivir esta aventura, en COCHA entregan algunas recomendaciones que harán de la experiencia algo mucho más significativa.
“Para que vayas preparado a la aventura en Sudáfrica, hay cosas que simplemente no pueden faltar en tu maleta. Primero, elige un bolso liviano y flexible para que lo puedas acomodar en cualquier parte. Trata de llevar ropa en tonos tierra que permitan mimetizarse con el entorno, recuerda vestirte por capas, y no dejes de llevar ropa de abrigo, pues las temperaturas oscilan bastante y la aventura empieza muy temprano”, dicen en la agencia de viajes.
Añaden que es fundamental que el viajero se proteja contra el viento y el sol, ideal para eso llevar un buen sombrero y una bandana que proteja de la tierra.
En COCHA recuerdan que no puede faltar una buena cámara fotográfica, “con baterías de repuesto y un buen lente que permita capturar buenas fotos, sin tener que acercarte demasiado a los animales”, recomiendan.
Una buena época del año para visitar esta zona de Sudáfrica es entre junio y agosto. Si bien es un periodo donde la vegetación se seca y el terreno se vuelve más difícil, son mayores las posibilidades de apreciar más especies de animales ya que se ven obligados a reunirse donde hay reservas de agua.
Otra recomendación es invertir un poco más de dinero y optar por alguna de las reservas privadas que operan en el parque. Ir solo al área pública del Kruger sale más barato, pero no asegura una buena experiencia. Distinto es realizar una expedición con guías experimentados en la zona.
