Malasia es un país exótico, generoso en escenarios naturales y lleno de contrastes, y si hasta hace un tiempo no era la primera opción como destino de quienes que se aventuraban en el continente asiático, hoy recibe millones de turistas cada año, lo que ha llevado a las autoridades locales a establecer un impuesto a los visitantes que se aplicará como recargo a cada noche de hotel que se reserve.
La medida, rechazada por la industria hotelera local, comenzará a ser norma a partir del próximo 1 de agosto y se estima que significará un ingreso extra al Estado de 136 millones de euros.
Según ha informado la prensa local, este recargo variará dependiendo de la clasificación de cada hotel. Así, los complejos de cinco estrellas deberán cobrar una tasa extra de 4,16 euros por noche, los de cuatro estrellas 2,08 euros y los hospedajes de entre una y tres estrellas tendrán un recargo de 1,04 euros por cada noche.
Incluso los hostales sin clasificación deberán aplicar un recargo de 0,52 euros por cada noche, quedan exentos del impuesto solo los alojamientos con menos de 10 habitaciones o los complejos dirigidos por instituciones religiosas sin fines de lucro.
En el Departamento de destinos lejanos de COCHA no se muestran extrañados por la medida, ya que “Malasia recibe más de 25 millones de visitantes cada año, que provienen principalmente de Singapur, Indonesia y China”.
En la agencia de viajes agregan que aún cuando su capital, Kuala Lumpur, es un destino imperdible para los viajeros debido a sus imponentes Torres Petronas (Los rascacielos más altos del mundo entre 1998 y 2003), en el resto del país existen lugares ideales para descubrir, recorrer y disfrutar. Un ejemplo, añaden en COCHA, es Malaca, una ciudad “con monumentos religiosos, arquitectónicos y playas".
Poseedora de una rica y heterogénea cultura, esta ciudad es el resultado de haber sido colonia de distintos imperios durante su existencia. De hecho, en 2008 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Entre sus atracciones se cuenta la Puerta de Santiago, bello testimonio arquitectónico de lo que alguna vez fue una de las cuatro entradas principales del Fuerte A Famosa, levantado en 1511 por los colones portugueses. Otros imperdibles son sus iglesias, donde destacan San Pablo y San Francisco Javier; y el Museo Marítimo, donde hay una réplica a tamaño natural del galeón portugués “Flor de la Mar”.
No obstante, tanto en la zona continental como en Borneo, Malasia destaca por sus increíbles selvas y parques nacionales, así como sus playas y hermosos fondos marinos. Sin ir más lejos, muchas de estas reservas naturales son resultado de los ingresos que llegan al país con los turistas extranjeros.
Al estar bañado por dos océanos y tres mares distintos, este país tiene una amplia variedad de costas, las que se adaptan a todo tipo de necesidades. Algunas solo son para descansar y tomar sol, mientras que hay otras ideales para el buceo o realizar deportes acuáticos.
Lo cierto es que ahora alojarse en este país asiático resultará un poco más caro que lo habitual, valor que se puede pagar si se toma en consideración toda la oferta de aventura y bellos paisajes que tiene este país.