El acuerdo de paz firmado hace ya un tiempo en Colombia permitió que ese país pudiera abrir al turismo internacional algunas regiones que normalmente no aparecían en su oferta tradicional de destinos vacacionales. No obstante, hoy la nación sudamericana pone a disposición de los viajeros hermosas áreas donde, por ejemplo, se puede visitar la cuna del famoso café colombiano, panorama ideal para quienes no pueden comenzar el día sin una rica taza de esta tradicional infusión de grano.
Es lo que ocurre con el pueblo de Salento, conocido en el país por ser la cuna del árbol nacional (la Palma de Cera) y ser el punto de partida de entretenidas caminatas ecológicas donde, por ejemplo, se puede disfrutar del avistamiento de aves o del proceso de producción del gano de café.
No obstante, si de aventura se trata nada mejor que arrendar un jeep Willys, llegados en la década del 50 a este país, y lanzarse a recorrer el Valle de Cócora y disfrutar una de las rutas más entretenidas de Colombia, tanto por su historia como por los desafíos que ofrece al turista.
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Tras salir del colorido pueblo de Salento el viajero se interna en un camino que está flanqueado por enormes palmas que alcanzan los 60 metros de alto y que son consideradas las más grandes del mundo.
Al respecto, José Concha, Product Manager de Latinoamérica de COCHA, comenta que “este es un destino que es mucho más de aventura, ideal para recorrer, explorar la naturaleza y disfrutar paisajes, entre otras actividades”.
Añadió que “Colombia es un país que tiene mucho que ofrecer en la zona del eje cafetero, en la región es posible tener viajes que son verdaderas experiencias; por ejemplo aquí uno tiene la posibilidad de hospedarse en haciendas cafeteras, recorrer sus valles, hacer cabalgatas, visitar museos y mucho más”.
Se espera que en un corto plazo todas estas actividades tomen más fuerza y mejoren su oferta a los turistas internacionales, especialmente luego que el gobierno central hiciera presente su intención de potenciar la actividad y su promoción como un nuevo destino para los viajeros.
El viaje por el Valle de Cócora termina en la entrada al Parque Nacional los Nevados, otro destino que es garantía de diversión y contacto directo con la naturaleza.
Ya de regreso, se puede hacer un alto en alguna de las tantas cafeterías que hay en la zona y que ofrecen uno de sus productos estrella, el café Juan Valdez que pertenece a la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia.
La gastronomía de la zona también ofrece sorpresas. Quienes han tenido la suerte de probar sus platos típicos dicen que una buena alternativa es tomar una taza de chocolate bien caliente con trozos de queso fresco. Los más osados sumergen el queso en el chocolate, mientras que los más recatados puede saborearlo por separado.
Ahora bien, si la idea es tomar algo más fuerte, pruebe con un ponche de maracuyá con piloncillo y aguardiente para conseguir una experiencia inolvidable.
