El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- Los adolescentes de hoy son personas netamente tecnológicas y es un hecho que muchos -si no la mayoría- de ellos son propietarios de una tablet, un celular o un computador, o tienen libre acceso a la televisión y a los videojuegos, haciendo de la exposición a las pantallas casi un "hábito".
Muchos estudios han advertido que esa "costumbre" de los adolescentes modernos es muy perjudicial para su salud tanto física -ya que favorece el sobrepeso y la obesidad- como psicológica, y muchos especialistas han hecho sus recomendaciones respecto a cuánto tiempo como máximo deberían pasar los jóvenes frente a una pantalla.
Sin embargo, un nuevo estudio parece echar por tierra todas estas creencias, al afirmar que existen otros "hábitos" que son más perjudiciales para la salud de los adolescentes, que pasar demasiadas horas expuestos a una pantalla.
La investigación fue realizada por las universidades de Oxford y Cardiff, y en ella participaron 120 mil jóvenes de 15 años, a quienes se les preguntó cuánto tiempo pasaban frente a los diferentes dispositivos tecnológicos y cómo se sentían después de usarlos.
Según informó el Foro Económico Mundial en su sitio web, un 99,9% de los adolescentes reconocieron que utilizaban algún dispositivo a diario y a pesar de que los investigadores determinaron que esto tiene un impacto negativo en su bienestar, este es pequeño en relación al que tiene -por ejemplo- que un joven no tome desayuno o no duerma bien durante la noche.
"En general, hallamos que el uso moderno de la tecnología digital no es intrínsecamente dañino y puede tener ventajas en un mundo conectado, a menos que los dispositivos digitales se usen en exceso o interfieran con el trabajo escolar o las actividades que se realizan después del colegio", sostuvo Andrew Przybylski profesor del Instituto de Internet de la Universidad de Oxford y autor principal del estudio.
Asimismo, Przybylski señaló que aunque el tiempo dedicado a las tecnologías digitales ha generado preocupación generalizada por su efecto negativo en el bienestar, puntualizó que esa es un área que no ha sido "rigurosamente estudiada".
Sin embargo, la pregunta de fondo continúa abierta: ¿cuánto tiempo frente a una pantalla es excesivo? Y la respuesta es variable, aunque las recomendaciones entregadas por la Academia de Pediatría Americana (APA) podrían servir como guía.
Según este organismo, las familias deben buscar un equilibrio entre la vida digital y real, desde el nacimiento hasta la adultez. Para ello, la APA recomienda que los padres y cuidadores desarrollen un plan, que tome en cuenta las necesidades educativas, de salud y de entretenimiento que tiene cada miembro y la familia completa.
En general, los consejos de la APA respecto a la exposición a pantallas para cada etapa del desarrollo, son los siguientes:
- Hasta los 18 meses: priorizar el juego creativo y desconectado.
- Desde los 18 hasta los 24 meses: se puede comenzar con la exposición a pantallas, con programas educativos y en compañía de adultos.
- Desde los 2 hasta los 5 años: máximo una hora diaria de exposición a pantallas, con programas de calidad y supervisión de un adulto.
- Niños en edad escolar y adolescentes: se debe buscar un equilibrio entre la exposición a pantallas y el tiempo dedicado al ejercicio, el dormir y otras actividades saludables.