SANTIAGO.- Como ya es costumbre en Estados Unidos, el Presidente Donald Trump cumplió este martes con el tradicional indulto del pavo, salvando a dos aves llamadas "Drumstick" y "Wishbone" de ser sacrificados en las fiestas de Acción de Gracias celebradas todos los años el último jueves de noviembre.
En compañía de su mujer, Melania Trump, y del hijo de ambos, Barron, el Mandatario indultó a los pavos en una actividad celebrada en la Rosaleda de la Casa Blanca.
A diferencia de las decenas de millones de pavos que serán cocinados en Acción de Gracias, "Drumstick" va a ser "muy feliz" porque "tiene un futuro muy brillante", bromeó Trump.
Asimismo comentó, en tono irónico, que los dos pavos indultados por su predecesor, Barack Obama, "Tater" y "Tot" pueden "descansar tranquilos", luego de ser informado que "bajo ninguna circunstancia" le está permitido revocar a los pavos que ya han sido indultados.
Las aves "perdonadas" por Donald Trump fueron criadas en Minesota y a pesar de que "Wishbone" no se dejó ver en la ceremonia oficial, ambos posaron para los periodistas tras haberse alojado desde el fin de semana en el Willard Intercontinental, un hotel de lujo en Washington.
Ya realizada la ceremonia, Trump y su familia viajarán hoy martes a Palm Beach, donde celebrarán Acción de Gracias y descansarán hasta el próximo domingo.
La fiesta de Acción de Gracias (Thanksgiving) fue establecida por Abraham Lincoln (1861- 1865) para conmemorar la celebración con la que los colonos británicos que llegaron a EE.UU. a bordo del "MayFlower" en 1620, que quisieron dar gracias a Dios por su buena cosecha después del invierno.
Desde entonces, Acción de Gracias se ha convertido en la fiesta más popular del año, compartida por todos los estadounidenses independientemente de cuál sea su religión.