SANTIAGO.- Menos de tres semanas nos separan del tan esperado día en que el príncipe Harry y Meghan Markle darán el sí en la capilla de St. George en el Castillo de Windsor. Y es por esto que el nieto de la reina Isabel II ha decidido someterse a un estricto método para bajar de peso y llegar al altar con un físico envidiable el próximo 19 de mayo.
Según constata El País, el príncipe ha sido visto entrenando en el exclusivo gimnasio KX en Chelsea, donde el valor anual es de 8.000 libras (aproximadamente 6 millones de pesos chilenos). Al centro deportivo también asisten celebridades como los actores Hugh Grant y Eddie Redmayne, además de Pippa Middleton, la hermana de su cuñada, la duquesa de Cambridge.
Para estar en forma para la boda real, Harry habría contratado a un entrenador personal en el gimnasio, quien lo ayuda con una
rutina de pesas todos los días a las siete de la mañana.
Además del ejercicio, el hijo menor del príncipe Carlos y la fallecida Diana ha hecho un cambio radical en sus hábitos alimenticios, eliminando de su dieta la carne, los alimentos procesados y disminuyendo las dosis de alcohol, a cambio de un menú en base de quínoa, repollo y alimentos veganos durante la semana.
Tras estos cambios en su rutina diaria, el
sexto en la línea de sucesión al trono británico habría perdido alrededor de cuatro kilos y con la ayuda de Meghan incluso habría incorporado el yoga a sus ejercicios matutinos.
"Meghan ha cambiado completamente el estilo de vida de Harry", dice una fuente al Daily Mail, agregando que "han comprado un exprimidor de primera calidad, y continuamente hacen jugos y batidos de frutas y verduras".
