Imagen de una cámara de seguridad en la que se aprecia a personal de seguridad del aeropuerto cargando a niña, tras haberla encontrado en el basurero de un baño del recinto.
AP
La Fiscalía qatarí afirmó este lunes que
fueron identificados los padres de una niña que fue abandonada en el aeropuerto de Doha, hecho que desató una polémica después de que el personal de seguridad realizara supuestamente
exámenes ginecológicos a pasajeras de vuelos que se dirigían a Australia en un intento por identificar a la madre.
En dos comunicados, la Fiscalía aseveró que las investigaciones revelaron que
la madre de la niña abandonada el pasado octubre
"tiene nacionalidad asiática", al igual que la persona con la que tenía una relación y padre de la pequeña, sin decir los países de los que son oriundos.
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La madre, al salir del país, tiró a la recién nacida a la basura en uno de los cuartos de baño de las salidas del aeropuerto
y subió al avión hacia su destino", el cual la Fiscalía no identificó.
La Fiscalía interrogó al padre de la pequeña, quien sí "admitió la relación con la madre de la niña, quien l
e envió un mensaje y una foto inmediatamente después de su nacimiento, donde ponía que iba a abandonarla y huir hacia su país".
Asimismo,
la Fiscalía volvió a justificar que el personal de seguridad "cumplió con su deber legal de buscar y encontrar al autor de este delito", aunque aclaró que "
algunos empleados se excedieron en los procedimientos, creyendo que eran correctos".
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Parte del personal de seguridad aeroportuario ha actuado unilateralmente convocando al personal médico femenino para realizar un examen externo de algunas viajeras, creyendo que lo que han hecho está en conformidad con la ley, ya que son oficiales de detención judicial que se especializan en buscar e investigar las circunstancias del crimen", se apunta en el comunicado, sin dar más detalles sobre los procedimientos realizados.
La Fiscalía también afirmó que
" intentar matar a una niña inmediatamente después de su nacimiento, y en las circunstancias en las que fue encontrada,
es uno de los delitos más atroces y más contradictorios a los valores humanos, además de ser sancionado por el Código Penal de Qatar con una pena máxima de 15 años".
El pasado 2 de octubre, se encontró una
recién nacida dentro de una bolsa de plástico escondida en un contenedor de basura en el Aeropuerto Internacional de Hamad de Doha.
Las autoridades del aeropuerto rescataron a
la pequeña, que se encuentra a salvo en un hospital de Doha, y se inició "una búsqueda urgente para evitar que los autores del horrible crimen escaparan".
Entre las pasajeras afectadas hay mujeres que viajaban a Australia y su avión hacía escala en Doha.
Australia se quejó del trato "ofensivo" y "extremadamente inapropiado" a las pasajeras, que no fueron informadas de manera adecuada de la razón del procedimiento y muchas de ellas quedaron traumatizadas, algo que tensó las relaciones entre Camberra y Doha.
