La princesa Charlene se encuentra en el palacio de Roc Agel, construido en 1957 por el príncipe Raniero III.
EFE
Tras el anuncio de la Casa Real de Mónaco, el pasado 12 de marzo, de que la princesa Charlene regresaba a casa después de cuatro meses ingresada en una clínica en los Alpes, ahora se conoció que la monarca continúa su recuperación en el palacio de verano de los Grimaldi, según publica la revista alemana Gala, citada por "La Vanguardia".
La residencia, llamada Roc Agel, está situada en un entorno idílico, en la ciudad de Peille y con una fabulosa vista al Principado.
El palacio fue construido en 1957 por el príncipe Raniero III, cuando ya estaba casado con Grace Kelly. La pareja se enamoró de la tranquilidad y el entorno privilegiado de la zona, Mont Agel, una montaña en la frontera entre Mónaco y Francia. El 13 de septiembre de 1982, Grace Kelly viajó de Roc Agel a Mónaco junto a su hija Estefanía. La propia princesa conducía el coche, su Rover 3500, pero un accidente en la sinuosa carretera le costó la vida.
Roc Agel cuenta con 56 hectáreas con cultivos ecológicos, vacas y unas 200 gallinas. En esa casa de campo Charlene disfruta de tranquilidad y de una gran privacidad, para poder recuperarse y regresar junto a su familia al Palacio Grimaldi.
Desde que llegó al Principado, Charlene convirtió ese lugar en su principal refugio. Fue allí donde ella, Alberto y sus dos hijos pasaron el confinamiento en 2020.
Su estancia en Roc Agel debería permitir que en las próximas semanas Charlene complete su recuperación reanude gradualmente sus compromisos oficiales.
No hay fecha prevista para su reaparición pública. Pero se especula que podría ser la próxima celebración del Gran Premio de Fórmula 1, que se celebra en mayo en el Principado, o incluso el Water Bike Challenge, el reto deportivo impulsado por la fundación de la princesa para el mes de junio.
Las últimas imágenes de la princesa son del 8 de noviembre de 2021, cuando regresó a Mónaco después de más de ocho meses en Sudáfrica.
Charlene lleva alejada de la vida pública desde hace más de un año cuando decidió ir a Sudáfrica en una acción contra la caza de rinocerontes. Durante su estancia en ese país, contrajo una grave infección de oídos, garganta y nariz que se habría complicado. En noviembre regresó a Mónaco e ingresó a un centro médico en los Alpes para recuperarse de "un estado de profunda fatiga general".
