La monarca asistió a un espectáculo ecuestre, donde se la vio caminando con la ayuda de un bastón.
AFP
La reina Isabel II apareció el domingo por la noche sonriente en un espectáculo ecuestre en Windsor, la primera gran celebración de su "Jubileo de platino", días después de renunciar a presidir la apertura de la sesión parlamentaria debido a sus problemas de salud.
Gran amante de los caballos, la monarca, de 96 años, llegó caminando con la ayuda de un bastón para presenciar el espectáculo en el que participaron 500 caballos y 1.300 artistas.
La salud de la reina es motivo de preocupación desde que en octubre pasado sus médicos le impusieron guardar reposo y se supo que había estado una noche hospitalizada para someterse a "pruebas" cuya naturaleza nunca se precisó.
Desde entonces, crecientes problemas de movilidad la han llevado a cancelar su participación en distintos eventos, el último de ellos el "discurso del trono", al que solo había faltado en dos ocasiones durante sus 70 años de reinado, la última de ellas en 1963.
Por primera vez fue remplazada en ese importante acto institucional por el príncipe Carlos, su heredero, de 73 años, en un importante paso en la transición progresiva de las funciones monárquicas.
El comentarista del programa hípico, Omid Djalili, bromeó agradeciendo a la soberana que eligiera este evento, en lugar de la apertura de la sesión parlamentaria, para su primera aparición pública desde el 29 de marzo.
El espectáculo, celebrado el domingo por la noche, formaba parte del Windsor Horse Show, una prestigiosa competencia ecuestre que la reina ya había visitado el viernes, y se anticipa a los grandes festejos del jubileo por sus siete décadas de reinado que tendrán lugar del 2 al 5 de junio en todo el Reino Unido.
