La FIFA, a través de su Comisión Disciplinaria, decidió abrir un procedimiento disciplinario contra el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, tras lo ocurrido en la final del Mundial Femenino, celebrada en Australia.
Según informa la entidad en un comunicado, la medida es tanto por el beso en la boca que le plantó el dirigente a la futbolista española Jenni Hermoso durante el acto de entrega de medallas, como por las imágenes de él en el palco durante la celebración en que se le ve realizando gestos que "podrían resultar constitutivos de violaciones de los artículos 13.1 y 13.2 del Código Disciplinario de la FIFA", .
El primer punto del artículo 13 señala que "las asociaciones y los clubes, así como sus jugadores, oficiales y cualquier otro miembro y/o persona que desempeñe una función en su nombre, deberán respetar las Reglas de Juego, así como los Estatutos de la FIFA y los reglamentos, directivas, directrices, circulares y decisiones de la FIFA, y cumplir con los principios de juego limpio, lealtad e integridad".
Mientras que el segundo punto del artículo, detalla pautas del comportamiento que podrían ser objeto de adoptar medidas disciplinarias, como "violar las normas básicas de conducta decente"; "insultar de cualquier forma a una persona física o jurídica, especialmente mediante el uso de gestos, signos o lenguaje ofensivos"; y "comportarse de manera que desacredite el deporte o desprestigie a la FIFA".
En el comunicado, la FIFA reitera su "compromiso absoluto con el respeto a la integridad de todas las personas" y "condena con el mayor vigor todo comportamiento contrario".
También aclara que su Comisión Disciplinaria no ofrecerá más información sobre el procedimiento abierto hasta que se adopte una decisión final.
Gobierno sigue de cerca el tema
En tanto, el Gobierno español prometió "actuar" ante el caso, luego de que ayer el sindicato que representa a la futbolista exigiera la adopción de "medidas ejemplares" contra el dirigente.
"Desde el Gobierno estamos siguiendo muy de cerca este hecho, porque las cosas no pueden quedar así. Desde luego esperamos acontecimientos, pero si no se dan, si no se producen, el Gobierno va a actuar", aseguró el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños.
En la misma línea ya se había pronunciado el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, quien advirtió que si la federación de fútbol no toma medidas contra Rubiales lo hará el Consejo Superior de Deportes (CSD), al que han llegado varias denuncias, incluida la de la Liga Profesional de Fútbol Femenino de España (Liga F), que pide inhabilitar al presidente de la federación.
La ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, también ha seguido mostrando su apoyo a la futbolista para dejar claro que culpar a las mujeres de las violencias que sufren "es cultura de la violación", según escribió en la red social X (ex Twitter).
Desde el PP, que ya se había sumado a la petición de dimisión o destitución de Rubiales, el vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta, Borja Sémper, instó al Gobierno a "resolver" la "patata caliente" del presidente de la federación, al que, subraya, no "le va a quedar otra que la dimisión o el cese".
