La princesa de Gales junto a su esposo el príncipe William.
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A tres días de que la princesa de Gales reconociera que editó la foto oficial que publicó el Palacio de Kensington para conmemorar el Día de la Madre, su esposo, el príncipe William bromeó sobre las habilidades artísticas de Kate en un evento público que tuvo lugar este jueves.
Mientras inauguraba un centro de caridad para jóvenes en el oeste de Londres, el heredero de la corona británica se burló de su falta de creatividad mientras decoraba galletas con unos niños.
Según consignó el diario Daily Mail, el príncipe de Gales señaló:
"Mi esposa es la artística. Incluso mis hijos son más artísticos que yo", dijo, aludiendo a que la actividad no se le hizo fácil y que su esposa lo hubiera hecho mucho mejor.
Es la primera vez que William nombra a su esposa públicamente tras la polémica que generó la fotografía que editó Kate. Además, el comentario surge al mismo tiempo que la monarquía británica afronta un intenso escrutinio por esta misma controversia.
La situación se generó porque varias agencias gráficas internacionales decidieron retirar la imagen de sus servicios al detectar que fue manipulada, tras lo cual la princesa de Gales aclaró que ella lo hizo y que experimentó como una "fotógrafa aficionada".
Aunque la familia trató de restar importancia a los retoques -que los expertos creen que pudieron realizarse con programas de edición o desde el propio móvil- subrayando la informalidad de la imagen, para los críticos este episodio socava la credibilidad de sus mensajes al público.
Esto es relevante cuando
continúan las conjeturas sobre el estado de salud de Kate, quien se sometió a una cirugía abdominal hace casi dos meses atrás por una dolencia no revelada. Sin embargo,
el Palacio no dio más antecedentes y solo aseguró que no es cáncer y que la princesa no asumirá compromisos hasta al menos después de Semana Santa.
Tras la ausencia de noticias de la princesa de Gales, la publicación intentó
contrarrestar las especulaciones sobre la salud y su paradero. Sin embargo, la percepción de manipulación ha avivado aún más las teorías de conspiración en torno a Kate y alimenta la incertidumbre sobre su situación actual.
