Los grandes almacenes de lujo londinenses
Harrods investigan si algún miembro de su plantilla actual estuvo implicado de alguna forma en las agresiones sexuales de las que decenas de mujeres han acusado al expropietario del establecimiento, el difunto
Mohamed Al Fayed.
Según la BBC,
una exempleada de Harrods, identificada como Jessica, acusó a un jefe que actualmente sigue en la empresa de no haber investigado cuando ella le presentó su queja por el comportamiento inapropiado de Al Fayed.
La mujer asegura que fue empujada contra una pared y agredida sexualmente por el magnate egipcio en 2008, cuando ella tenía 22 años.
Los grandes almacenes replicaron que
se está llevando a cabo una revisión interna que incluye "examinar si algún miembro de la plantilla actual estuvo implicado en cualquiera de las acusaciones directa o indirectamente", según la BBC.
Harrods asegura estar en contacto con la Policía Metropolitana de Londres para realizar esta indagación.
De acuerdo con el testimonio de Jessica (nombre ficticio), presentó una queja en el departamento de Recursos Humanos por el comportamiento inapropiado de Al Fayed, aunque no detalló el alcance de la agresión sexual.
Uno de los presentes en la reunión, que según la mujer parecieron estar al corriente del carácter sexual de la denuncia, permanece en Harrods en un puesto de responsabilidad.
Jessica fue presionada para firmar un acuerdo de confidencialidad por "múltiples personas" en la sala, tras sentirse amenazada, según su testimonio.
Los abogados de las víctimas que han hecho públicas las agresiones sexuales de Al Fayed en un documental de la BBC difundido la semana pasada, aseguraron este sábado que ya han recibido más de 150 consultas.
La Fiscalía de la Corona británica reconoció que rechazó hasta en dos ocasiones presentar cargos por delitos sexuales contra el fallecido empresario, en 2008 y en 2013, al considerar que no había pruebas sólidas contra él.