MOSCU.- Los líderes de la UE arribaron hoy a Moscú para impulsar la cooperación entre Europa y Rusia, condicionada por la intransigencia moscovita sobre la cuestión chechena, que la Unión Europea desaprueba.
El premier portugués y presidente de turno de la UE, Antonio Guterres, Javier Solana, representante de la política exterior europea y Romano Prodi, presidente de la comisión de la UE llegaron a la capital rusa y se reunieron con el presidente local, Vladimir Putin.
La cuestión clave de la visita es relanzar la cooperación económica entre el inmenso país del Este europeo y la UE, una ocasión que Romano Prodi definió "irrepetible" para las relaciones bilaterales.
El presidente de la comisión europea es optimista sobre el futuro de Rusia y en una rueda de prensa, al concluir los coloquios declaró que con el presidente Vladimir Putín, Rusia tiene ahora un poder muy fuerte con perspectivas de largo alcance.
Por su parte, Putín prometió hoy a los representantes de la Unión Europea que castigará a todos aquellos que hayan cometido delitos en Chechenia, incluídos los militares rusos y dijo que la justicia rusa está investigando un centenar de casos.
El presidente ruso anunció también que someterá a la Duma, la cámara baja del Parlamento, un proyecto de ley para dar inicio a la administración transitoria en la república rebelde.
Para el líder ruso será el primer paso hacia la normalización de la situación en Chechenia desde el inicio del conflicto, en agosto último, desatado por las incursiones de los guerrilleros chechenos en algunas aldeas del Daguestán.
Pero Putín advirtió a los representantes de la UE que proseguirán las actividades militares para liquidar el "terrorismo" en el Cáucaso.
En el lenguaje del liderazgo ruso, los chechenos que combaten por la independencia de su república, son "terroristas".
Mientras Putín recibía a la "troika" europea, el ejército ruso lanzaba una nueva y furiosa ofensiva contra los rebeldes en el sur de Chechenia.
La puesta en juego tanto para Rusia como para Europa, es altísima, dijo Prodi, quien destacó "el inesperado crecimiento macroeconómico ruso" con el aumento de la producción industrial, la balanza comercial en superávit y una neta mejoría del presupuesto estatal.
El representante de la UE dijo que en Europa existen muchos capitales importantes que están a la búsqueda de buenas ocasiones para invertir y pidió al presidente ruso para garantizar dichos capitales el respeto de las leyes, la protección de las inversiones y la creación de estructuras que creen condiciones favorables para el comercio.
Putín asintió a las condiciones puestas por la troika europea para relanzar la cooperación con Rusia y auspició la prosecusión del diálogo a más amplia escala.
La cooperación con la UE, parte aventajada, puesto que el 50/60 por ciento de los intercambios comerciales de Rusia se realizan con países del área europea.
