MEXICO.- El presidente electo de México, Vicente Fox, trabajará con un presupuesto de gastos restringido en su primer año en el poder y una legislación para impulsar los ingresos por impuestos probablemente tendrá que esperar un poco, dijo el jueves uno de sus asesores.
Fox, quien ganó las elecciones presidenciales del domingo, asumirá el poder el 1 de diciembre, poniendo fin a 71 años ininterrumpidos en el poder del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El jefe de los asesores económicos de Fox, Luis Ernesto Derbez, dijo el jueves en una llamada de conferencia auspiciada por el banco de inversión Morgan Stanley Dean Witter que el equipo económico de Fox ha encontrado una "actitud tremendamente receptiva" en el gobierno del presidente Ernesto Zedillo.
El mandatario ha prometido que el período de transición no conducirá al tipo de bomba económica que le fue heredada cuando asumió la presidencia en 1994, que llevó a una devaluación monetaria desastrosa en las primeras semanas de su administración y a la peor recesión en el país desde la década de 1930.
Derbez dijo que su equipo está trabajando estrechamente con funcionarios de la administración de Zedillo para presentar al Congreso, a fines de septiembre, un presupuesto para el 2001.
"Nos gustaría ser tan conservadores como sea posible en términos del lado de ingresos en el próximo presupuesto y tenemos un objetivo de cerca de 0,5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) como déficit del sector público para el 2001", dijo Derbez.
La meta del gobierno de Zedillo es de un déficit de 1,0 por ciento del PIB para este año, lo que representa un descenso frente al 1,2 por ciento de 1999.
El nuevo Congreso del país, también elegido el domingo, entrará en funciones el 1 de septiembre.
AMPLIA REFORMA TRIBUTARIA
Fox ha dicho que desea una amplia reforma tributaria para impulsar los ingresos fiscales, ahora en un pálido 11 por ciento del PIB, cifra que se compara con 17 por ciento en Chile.
Pero Derbez dijo que la nueva cámara baja del Congreso, donde la alianza entre el conservador Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido Verde que respaldó a Fox no tendrá una mayoría absoluta, probablemente no podrá abordar tanto el presupuesto del 2001 como la reforma tributaria antes de fines de año.
"Pensamos que alrededor de enero o febrero tal vez" se podrá enviar la legislación sobre la reforma tributaria al Congreso, dijo Derbez. Entre tanto, funcionarios de Fox se reunirán con "grupos de interés" en un intento por presentar una iniciativa tributaria de consenso, dijo.
Fox mantendrá sus promesas electorales de no privatizar al monopolio petrolero estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) o el sector eléctrico del país. Sin embargo, buscará más inversión privada extranjera e interna en áreas clave de la economía, entre ellas transporte, telecomunicaciones y generación eléctrica, dijo Derbez.
Mejorar la producción de electricidad es clave para cumplir con la meta de Fox de un crecimiento económico para el país de siete por ciento anual en los años finales de su gobierno de seis años.
"Lo que se contempla es la creación del ambiente legal requerido para que la inversión del sector privado (...) en el sector eléctrico pueda ocurrir lo más pronto posible", dijo Derbez.
Agregó que el jueves se reunió con funcionarios del Banco de México y enfatizó que Fox respetaría la autonomía del banco central.
"Sentimos muy fuertemente que la responsabilidad de la política de tasas de cambio debe yacer y permanecer en el banco central", indicó.
