BOGOTA.- Cabecillas del frente 43 de las FARC han reconocido tener secuestrada a una niña de nueve años dentro de la zona de distensión creada para los diálogos de paz por el Gobierno colombiano, reveló la última edición del semanario "Cambio".
La responsabilidad del secuestro de Clara Oliva Pantoja Mahecha, de nueve años, y del niño Andrés Felipe Navas, de tres, ha sido negada desde hace dos semanas por la jefatura del grupo rebelde, que considera las denuncias como un intento de hacer fracasar el proceso de paz.
La retención de los niños en la zona, denunciada por la Fiscalía a principios de mes, ha abierto una nueva crisis en los diálogos entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por el uso que éstas hacen del área desmilitarizada, de 42.000 kilómetros cuadrados.
El reconocimiento hecho por mandos medios de las FARC ante familiares de Clara Oliva, secuestrada hace tres meses y medio en Bogotá, fue posible a finales de junio gracias a la mediación del sacerdote italiano Franco Londdo.
Londdo, vicario apostólico de Mesetas, una de las cinco poblaciones que componen el área neutral, confirmó a "Cambio" que gestionó el encuentro de los rebeldes con los allegados de Clara Oliva, pero rechazó hacer más declaraciones por orden de sus superiores.
La revista aseguró que dos tíos de la niña, acompañados de Londdo, se entrevistaron con dos comandantes guerrilleros que se identificaron como Agustín y Nacho, y un tercer hombre que no dijo su nombre.
Estos les dijeron a los tíos de Clara Oliva que no podían pedir por su libertad menos de 1.500 millones de pesos (unos 700.000 dólares).
Durante la conversación, el guerrillero Nacho reconoció haber estado a cargo del secuestro del abuelo de Clara Oliva, Manuel Pantoja, hace un año y medio y liberado tras el pago de un millonario rescate que "dejó quebrada a la familia", según el semanario.
La familia asegura tener pruebas de que la niña está cautiva en Vistahermosa, otro de los cinco municipios del área neutral.
Londdo también medió en el caso de Andrés Felipe, pero sin éxito, porque aunque contactó con comandantes del frente 40 de las FARC en Mesetas, en la zona desmilitarizada, a quienes se atribuye el secuestro, éstos negaron tenerlo.
La Fiscalía asegura que el niño está retenido en Mesetas, pues así lo indican el rastreo de llamadas de los secuestradores a su familia en las que exigen un rescate de ocho millones de dólares.
Andrés Felipe fue secuestrado como Clara Oliva a principios de marzo pasado en Bogotá por hombres armados que irrumpieron en la casa familiar.
El portavoz oficial de las FARC, Raúl Reyes, aseguró que no es política del grupo retener niños ni usar la zona de distensión como "campo de concentración de secuestrados", como ha denunciado la Iglesia Católica.
Para esclarecer los dos casos, las FARC han creado una comisión especial que investigue si los niños están en la zona y dijeron que entregarán a las autoridades a los responsables, pues niegan que se trate de alguno de sus hombres.
