LUCERNA.- La próxima beatificación del papa Pío IX, considerado como un conservador antisemita del siglo XIX, suscita amargura e incomprensión en Suiza, así como en historiadores de diferentes credos, incluso el católico.
El 3 de setiembre venidero, Juan Pablo II beatificará a los dos papas que organizaron los últimos concilios, Pío IX (1846-1879), el Vaticano I en 1870, y Juan XXIII (1958-1963) el Vaticano II en 1962.
La doble beatificación fue deseada por Juan Pablo II "para expresar la continuidad doctrinaria de la Iglesia", explicó Nicolás Betticher, vocero de la conferencia de obispos suizos.
"(El concilio) Vaticano I reafirmó lo pertinente de la fe católica frente a la revolución industrial. (...) Vaticano II quiso abrir aún más ampliamente la Iglesia al mundo", dijo Betticher.
Pero para Markus Ries, historiador de la Iglesia en la Universidad de Lucerna, Pío IX no es sólo quien proclamó dos dogmas importantes de la fe católica, el de la infalibilidad del Papa y de la inmaculada concepción de la Virgen María, es también un pontífice ultraconservador y de antisemitismo militante.
Estas críticas fueron expuestas en la Asociación de historiadores de la Iglesia católica de lengua alemana el 13 de junio en Innsbruck, Austria.
La Asociación publicó un comunicado excepcional manifestando su inquietud por el proyecto de beatificación.
"La beatificación (de Pío IX) será una manera de desautorizar todas las declaraciones de (el Concilio) Vaticano II y de Juan Pablo II sobre los Derechos Humanos y las relaciones entre la Iglesia y los judíos", indicó el comunicado.
La célebre declaración de Pío IX "la tradizione sono io" -la tradición soy yo-, integra "las páginas más vergonzosas de su pontificado", según los historiadores.
La Federación suiza de comunidades israelitas también manifestó su desacuerdo por la beatificación de Pio IX ante la conferencia de obispos suizos.
"El antisemitismo virulento de Pío IX no traduce sólo el de una época, sino también el suyo propio", afirmó el secretario de la organización Martin Rosenfeld.
Si, por definición, ni los obispos suizos ni los de otros países pueden oficialmente pronunciarse ante una decisión papal, los católicos suizos no han dejado de criticar la próxima beatificación.
Así por ejemplo, el padre jesuita Pierre Emonet, jefe de redacción de la revista católica suiza "Choisir", afirmó en una nota editorial de dicha publicación que "Pío IX ha sido quizá un hombre piadoso, pero todo lo que hizo como Papa ha sido lamentable".
