NUEVA YORK.- El presidente cubano, Fidel Castro, se entrevistó hoy con su colega chino, Jiang Zemin, horas después de llegar a Nueva York para participar en la Cumbre del Milenio por la Paz que se celebrará en Naciones Unidas.
Nada se ha filtrado, por el momento, de la reunión que, según fuentes diplomáticas, se celebró en la misión de Cuba ante la ONU.
Castro llegó poco después del mediodía al aeropuerto internacional J.F.Kennedy de Nueva York y se dirigió inmediatamente a la misión, donde estará alojado durante su visita a esta ciudad.
Según las fuentes, el presidente tenía también previsto entrevistarse con el primer ministro de Malasia, Syed Hamid Albar.
La agenda de Castro, que habría sido preparada en una reunión secreta la pasada semana entre representantes cubanos, agentes del servicio secreto estadounidense y la Policía neoyorquina, es objeto de un mutismo oficial total por razones de seguridad.
La misión cubana está vigilada por un fuerte dispositivo policial en previsión de posibles disturbios ya que organizaciones contrarias al gobierno de La Habana, entre ellas la Fundación Nacional Cubano Americana, el Movimiento por la Democracia y las Madres y Mujeres contra la Represión, han anunciado manifestaciones de protesta que comenzaban hoy y prevén continuar hasta su partida.
Castro, quien viajó acompañado por el presidente de la Asamblea Nacional, Ricardo Alarcón, y el ministro de Asuntos Exteriores, Felipe Pérez Roque, intervendrá mañana, miércoles, en la sesión plenaria de la Cumbre del Milenio en la que se espera la asistencia de más de 150 jefes de Estado y de gobierno.
Su turno de intervención ha sido modificado en el último momento para pasar del penúltimo de la sesión al puesto número 19, lo que significa que tendrá una mayor audiencia y atención.
El jueves por la mañana participará en una mesa redonda que moderará Polonia y en la que también participarán los dirigentes políticos de Canadá, Pakistán, Brasil, Ecuador y Rusia, entre otros.
Se prevé que el presidente, que efectúa su cuarta visita a la ONU desde que llegó al poder, tendrá diversos encuentros bilaterales y actividades al margen de los debates en la organización internacional pero la agenda es un secreto bien guardado.
Fuentes financieras norteamericanas indicaron que el presidente cubano podría reunirse con representantes de grandes bancos y empresas de Estados Unidos, pero nada está confirmado.
Además, se espera su asistencia a un acto de apoyo a Cuba que se celebrará en la Iglesia Riverside, al que podría acudir unas 3.000 personas.
Entre los encuentros posibles figura uno con la religiosa Jean Brown Campbell, que tuvo un papel activo en los siete meses de negociación que fueron necesarios para el retorno a Cuba del niño balsero Elián González tras naufragar cerca de las costas de Florida (EEUU).
Campbell, quien se entrevistó con Castro, el padre del niño y representantes del gobierno estadounidense durante el litigio, ha declarado al diario "The New York Post" que quiere hablar con el presidente del futuro del niño y sobre la manera de seguir en contacto con una familia que dice conocer bien.
El congresista demócrata Charles Rangel, que apoyó el regreso de Elián a Cuba y defiende reforzar los lazos con la isla y levantar el embargo estadounidense contra este país, también espera conversar con líder cubano.
Según un portavoz de Rangel, Emil Milne, los cubanos dan casi por seguro el encuentro pero ignoran cuándo o dónde se celebraría.
En general, los desplazamientos del presidente no se conocen hasta el último momento o después de que ocurran y en Nueva York las medidas serán aún más estrictas de lo habitual.
Grupos de exiliados, entre los que figura el congresista de origen cubano Lincoln Díaz-Balart, han pedido el arresto de Castro, al que acusan de crímenes contra cubanos y de la muerte de cuatro personas, en 1996, que eran miembros de la organización Hermanos al Rescate.
