LA PAZ.- El presidente de Bolivia, Hugo Banzer, anticipó hoy que la creación de empleo y la apertura del mercado estadounidense serán las bases de un plan que Estados Unidos apoyará para sostener la lucha contra las drogas en este país.
Banzer reasumió hoy sus funciones en La Paz, tras su participación en la Cumbre del Milenio organizada por la Organización de Naciones Unidas, la semana pasada en Nueva York, donde se entrevistó durante más de una hora con el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton.
El mandatario boliviano confirmó que su colega estadounidense se comprometió a respaldar un plan que permita la creación de empleo en este país, como compensación adicional de Washington al esfuerzo de Bolivia en la lucha contra las drogas.
Entre 1997 y el 2000, Bolivia redujo de 40.000 a menos de 3.000 las hectáreas de coca, utilizada para la elaboración de cocaína, pero ello ha implicado que dejaran de circular en la economía boliviana cerca de 500 millones de dólares que generaba el narcotráfico.
El Jefe de Estado, que por ese éxito recibió el respaldo de los partidos políticos, incluidos los de la oposición, dijo que el programa será elaborado para su presentación al gobierno de Estados Unidos este mismo año.
Según dijo, el apoyo estadounidense podría reflejarse en un fondo destinado a la promoción de puestos de trabajo como mecanismo para aliviar la situación derivada de la abrupta disminución de la actividad del narcotráfico en este país.
Banzer adelantó a Clinton que el vicepresidente boliviano, Jorge Quiroga, viajará esta semana a Estados Unidos al frente de una delegación que pedirá al Congreso de Washington la liberación del pago de impuestos a las exportaciones de textiles de Bolivia.
Los presidentes de Bolivia y de Estados Unidos coincidieron en la necesidad de sostener la producción de coca en el nivel de consumo campesino permitido por la ley, equivalente a la existencia de 12.000 hectáreas, para "mantener al país alejado del estigma de la droga".
El gobierno boliviano pretende eliminar los cultivos de coca ilegales antes de completar su periodo constitucional, en agosto del 2002.
Banzer destacó la preocupación de Clinton por la situación de Bolivia que se manifestó en la invitación que le hizo, la única del mandatario estadounidense a los participantes en la Cumbre del Milenio en Nueva York.
El próximo viernes llegará a Bolivia el director de la oficina de Prevención de Drogas de la ONU, Pino Arlacchi, quien ya se reunió con el presidente boliviano en Nueva York.
