BEIJING.- China declaró hoy domingo su "suma indignación" por la canonización de 120 católicos que murieron bajo una represión religiosa en China, calificándolos de "pecadores de maldad" culpables de violaciones y saqueos.
La declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores fue secundada por el líder de la Iglesia Católica china, dirigida por el estado, el obispo Fu Tieshan, quien calificó de "intolerable" la ceremonia de canonización efectuada por el papa Juan Pablo II en el Vaticano.
"Algunos de esos canonizados por el Vaticano esta vez perpetraron desmanes como violaciones y saqueos en China y cometieron crímenes imperdonables contra el pueblo chino", dijo la cancillería en un comunicado divulgado por la agencia oficial de noticias, Xinhua.
La declaración no ahondó en detalles específicos. El Papa declaró mártires a los 120 canonizados -87 católicos chinos y el resto misioneros extranjeros- porque murieron por su fe, la mayoría en el levantamiento Boxer de hace un siglo, que surgió contra los cristianos y occidentales.
La fecha en que el Vaticano decidió efectuar la ceremonia encolerizó a muchos dirigentes políticos y religiosos chinos porque coincide con el 51er. aniversario del régimen comunista en China.
