NAZRAN.- Aviones de combate y artillería de Rusia atacaron hoy martes presuntas posiciones rebeldes en la frontera chechena, mientras el Ejército lanzó sus ataques desde bosques y escarpadas montañas de la república separatista, informaron funcionarios.
En tanto, los rebeldes caucásicos atacaron 18 veces los puestos federales en el curso de las pasadas 24 horas, entre ellos, ocho puestos de control rusos en la capital provincial, Grozny, según informes de un funcionario de la administración civil pro rusa de Chechenia.
Cuatro soldados rusos murieron y siete resultaron heridos durante los ataques, entre los que hubo una emboscada contra un convoy ruso cerca de Zhani-Vedeno, en el área sur del desfiladero de Vedeno.
Los rebeldes también siguieron plantando minas en zonas de Chechenia que oficialmente siguen bajo el control ruso. Un vehículo blindado para personal, que trasladaba tropas del ministerio del Interior, activó ayer una mina terrestre en Grozny, señaló el funcionario a condición de no ser identificado. No hubo información sobre las bajas.
Personal anti-bombas desactivó con éxito una bomba sencilla, provista de un dispositivo de control remoto, cerca de la iglesia ortodoxa rusa del Arcángel Miguel, en Grozny, agregó la fuente.
También se descubrieron bombas en una carretera cercana a la ciudad sudoccidental de Urus-Martan y en una vía férrea que lleva de Gudermes, sede del gobierno pro-ruso a la ciudad de Argun, al este de Grozny. Ambos dispositivos fueron desactivados con éxito.
Pero un soldado murió y dos resultaron heridos cerca de la ciudad de Dzhalka, 15 kilómetros al este de Grozny, cuando una bomba explotó mientras un grupo de soldados reparaba las vías de un ferrocarril y los rebeldes les dispararon.
