ROMA.- Historiadores católicos y judíos plantearon este jueves decenas de interrogantes al Vaticano en torno a su papel durante el Holocausto y pidieron a la Santa Sede que abra plenamente sus archivos de la II Guerra Mundial.
Al explicar su labor en rueda de prensa, los tres eruditos judíos y tres católicos dijeron haberse conmovido cuando revisaron los 11 volúmenes de materiales publicados en torno a las actividades del Vaticano durante la II Guerra Mundial y que deseaban ver más.
"Los historiadores han pedido pleno acceso a los archivos", dijo Seymour Reich, presidente del Comité Internacional Judío para Consultas Interreligiosas y uno de los coordinadores del proyecto, que comenzó hace un año.
"No está claro qué habrá de obtenerse, pero confiamos en que... al menos los documentos en torno a esas interrogantes, que están disponibles en los archivos, serán proporcionados a los seis eruditos", dijo.
La labor de la comisión representó la primera vez que historiadores judíos y católicos han trabajado juntos en un proyecto de ese tipo. Las decenas de interrogantes en el informe, divulgado inicialmente el miércoles por el grupo judío B'Nai B'rith Internacional, están agrupadas en 46 secciones.
Aunque el grupo no estaba obligado a alcanzar conclusiones sobre el papel del Papa Pío XII, muchas de las interrogantes se refieren directa o indirectamente a la necesidad de saber lo que el Pontífice durante la era del conflicto supo acerca del Holocausto y cuándo lo supo.
Hubo un llamamiento subyacente para una mayor diafanidad global en el informe a fin de que se asista a los historiadores en establecer por qué Pío XII eligió no hacer una denuncia más específica mientras los nazis exterminaban a los judíos.
"Quizá las expectativas de los judíos eran enormemente elevadas. El mundo volvía la vista hacia el Papa para cosas que no esperaban de otros", dijo Eva Fleischner, una historiadora católica.
Pío XII no condenó acción Nazi
Fleischner, una estadounidense, dijo que al igual que otros líderes mundiales, Pío XII, quien tenía preparación como diplomático, "fracasó en reconocer la magnitud" del régimen nazi hasta que era demasiado tarde.
La iglesia ha defendido a Pío XII, diciendo que trabajó tras bambalinas para salvar a judíos y que no hizo denuncias más vigorosas, con el objeto de no provocar más atrocidades nazis.
Los eruditos pidieron ver los diarios que Pío XII pudo haber mantenido y memorandos sobre los discusiones en su círculo de allegados durante la guerra.
"Hay evidencias de que la Santa Sede estaba bien informada, para mediados de 1942, del acelerado asesinato en masa de judíos. Siguen formulándose interrogantes en torno a la recepción de esas noticias y la atención que se les dio", dijo el reporte.
